Todo es hermoso, los monstruos tambien

'Por ocultar la realidad, ésta no va a dejar de existir', dice el fotógrafo Witkin

El fotógrafo norteamericano Joel-Peter Witkin expone una antológica de su obra en el Centro de Arte Reina Sofía. Esta es la primera y más extensa muestra de Witkin realizada en Europa, la tierra de sus cercanos antepasados. Después de 30 años haciendo fotos y cercano a cumplir el medio siglo de edad, Witkin nos recuerda en sus trabajos que el concepto de belleza es demasiado convencional, y trata de mostrar que ésta se halla también en los seres fisicamente más desafortunados.

Con un trasfondo de sentimiento religioso, el autor nos explica las razones que le impulsaron a elegir la temát...

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El fotógrafo norteamericano Joel-Peter Witkin expone una antológica de su obra en el Centro de Arte Reina Sofía. Esta es la primera y más extensa muestra de Witkin realizada en Europa, la tierra de sus cercanos antepasados. Después de 30 años haciendo fotos y cercano a cumplir el medio siglo de edad, Witkin nos recuerda en sus trabajos que el concepto de belleza es demasiado convencional, y trata de mostrar que ésta se halla también en los seres fisicamente más desafortunados.

Con un trasfondo de sentimiento religioso, el autor nos explica las razones que le impulsaron a elegir la temática por él tratada. Para hablar de su obra, Witkin tiene irremediablemente que referirse a sí mismo, a sus vivencias personales y a su particular manera de sentir la religión. La sala donde muestra una selección de 70 obras adquiere un aspecto de capilla, acentuado por la iluminación y por la presencia de un montaje con un Cristo de cuatro metros de altura. "Ésta es la exposición más amplia e importante que se ha hecho sobre mi trabajo. Soy americano de dos generaciones, de origen ruso e italiano, y siento que mi obra tiene un trasfondo europeo". La selección del lugar y de las fotos ha sido realizada por Alain Dupuy, comisario de la muestra. Después de sus anteriores exposiciones en Nueva York y en San Francisco, la obra de Witkin es de las más solicitadas por los coleccionistas americanos. Recientemente, en Arco, una galería vendió copias suyas a más de 2.000 dólares; sus tiradas tienen un máximo de 15 ejemplares.Graduado en escultura y con títulos en poesía y literatura, eligió la fotografía instintivamente, porque le permite expresarse más profundamente. "La realidad es lo que uno ve en su propia mente. El trabajo creativo sirve para mejorarse a sí mismo, y ésta es la única manera de intentar hacer un mundo mejor. No me considero provocador, trato de ser honesto y sincero y expresar claramente, sin medias tintas, mis sentimientos. Necesito hacer fotos para ver la forma tangible que adoptan mis sueños".

Witkin no oculta que la religiosidad de su ambiente familiar le influyó profundamente. "Mi padre era judío, y mi madre, católica, y yo me considero católico romano, aunque tengo mis reservas acerca de la Iglesia. No hay que confundir la creencia y la burocracia. Pienso que la Iglesia es una organización cada vez más alejada de la realidad y las necesidades sociales, y que su credibilidad naufraga irremediablemente". En sus palabras aparece cierto trasfondo místico. "Creo que la muerte forma parte de la vida. Es un milagro estar vivo y cada día es una oportunidad de cambiar a mejor. Ya que estamos en este mundo para algo, hagámoslo. No se puede pasar por la vida como se deja una hoja en blanco. Hay que marcar o escribir algo en ella".

Los modelos

Witkin fotografía a seres marginados, porque siempre se ha sentido atraído por la realidad particular de la gente bizarre, única, con deformaciones físicas o mutilada. "Por ocultar o no mostrar la realidad, ésta no va a dejar de existir". Busca a la gente en anuncios, por teléfono, y en ocasiones sus modelos le recomiendan a otros, rehuyendo a los freaks (monstruos) profesionales. "En mi caso tengo una intensa y franca relación con los modelos, les enseño bocetos para que tengan una idea clara de lo que quiero hacer. Lógicamente, ellos desean saber qué uso público se va a hacer de su imagen. Gracias a que me dan la oportunidad de acompañarles y de entrar en sus vidas por un tiempo, puedo buscar la manera de establecer una idea que podamos compartir el modelo y yo para crear algo juntos". En su trabajo descontextualiza al modelo preparando un montaje que elimine todo referente social.Minucioso en su trabajo, Witkin utiliza una cámara Rolleiflex del 56 y luz de flash, ya que de este modo controla mejor los resultados de sus escenificaciones. Una parte importante de su trabajo transcurre en el laboratorio, donde pasa muchas horas al día. A veces tarda tres horas en hacer una copia y hasta una semana en obtener la definitiva. "Siempre anoto paso a paso los datos del proceso. Rayando, virando y solarizando, transformo la apariencia física de la foto, consiguiendo una suerte de nebulosa en tomo a la imagen".

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