El consumo de jabalí

infectado procedente de cacerías ha sido vinculado por el Ministerio de Sanidad con el aumento de triquinosis en España, por lo que se ha advertido para que se extremen las precauciones. En la temporada de 1984-1985 afectó a 98 personas; en la de 1985-1986, a 62, y en la de 1986-1987 aumentó a. 140; estos brotes, según Sanidad, se debieron, respectivamente, en un 60%, 5,0% y 80% al consumo de carne de jabalí procedente de cacerías que no habían sido controladas sanitariamente por los veterinarios, en contra de lo que es preceptivo. La triquinosis la produce un parásito que anida en la carne de...

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infectado procedente de cacerías ha sido vinculado por el Ministerio de Sanidad con el aumento de triquinosis en España, por lo que se ha advertido para que se extremen las precauciones. En la temporada de 1984-1985 afectó a 98 personas; en la de 1985-1986, a 62, y en la de 1986-1987 aumentó a. 140; estos brotes, según Sanidad, se debieron, respectivamente, en un 60%, 5,0% y 80% al consumo de carne de jabalí procedente de cacerías que no habían sido controladas sanitariamente por los veterinarios, en contra de lo que es preceptivo. La triquinosis la produce un parásito que anida en la carne del jabalí, sin que pueda distinguirse cuándo el animal está o no afectado. No suele producir la muerte del paciente, pero sí edemas en los párpados, hemorragias conjuntivales, fotofobia, diarrea, dolores musculares, fiebre y trastornos neurológicos.-

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