La respuesta del silencio
F. S.Otros títulos se han incorporado en los dos últimos años al abanico de publicaciones existentes en España. Por iniciativa privada surge en Sevilla, en 1985, la semestral ER. Revista de Filosofía, con 1.350 ejemplares, con subvenciones del Ayuntamiento y Diputación sevillanas. El nombre, ER, personaje de la República de Platón, un guerrero que muere en combate y se reencarna en su propio cuerpo, es para sus editores un símbolo de la situación de la filosofía en España. Según su director, Juan Antonio Rodríguez Tous, mantiene una independencia absoluta, ...
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F. S.Otros títulos se han incorporado en los dos últimos años al abanico de publicaciones existentes en España. Por iniciativa privada surge en Sevilla, en 1985, la semestral ER. Revista de Filosofía, con 1.350 ejemplares, con subvenciones del Ayuntamiento y Diputación sevillanas. El nombre, ER, personaje de la República de Platón, un guerrero que muere en combate y se reencarna en su propio cuerpo, es para sus editores un símbolo de la situación de la filosofía en España. Según su director, Juan Antonio Rodríguez Tous, mantiene una independencia absoluta, menos la económica; se enfrenta a problemas de los canales comerciales (distribución) y quiere acoger todas las tendencias ,de la filosofía.
Combate cultura
Una de las últimas revistas en aparecer en el mercado ha sido la trimestral La Balsa de la Medusa, con 3.000 ejemplares, el tercer número en imprenta y editada sin subvenciones por Ediciones Antonio Machado, de Madrid. Para información general, la fragata francesa La Medusa naufragó en la costa occidental de Africa en 1816; de los 150 pasajeros que subieron a una balsa, sólo 10 lograron sobrevivir. Su director, Valeriano Bozal, plantea en esta "revista de náufragos" con 3.000 ejemplares, dentro del campo de la estética del arte, mantener el debate cultural y filosófico con atractivos para el lector.
Bozal comenta que el primer número fue recibido con el silencio. En la presentación se decía que "las balsas están ahí para que las aborden náufragos nuevos, recibidos con amistosos garrotazos, y para suscitar de cuando en cuando la cuestión de la antropofagia y de la viabilidad de las buenas costumbres".