El presidente peruano, Alan García, rechaza el fantasma del golpismo
El presidente de Perú, Alan García, rechazó ayer la posibilidad de un golpe militar como consecuencia del debate sobre la ley de nacionalización del sector financiero privado y de su jubilación política en 1990. El Jefe del Estado peruano negó ambas eventualidades en los discursos pronunciados durante la inauguración de unas obras en Lima.
Al referirse a las denuncias formuladas en el Senado peruano el pasado jueves sobre la preparación de un compló golpista por parte de sectores que se verán afectados por la expropiación del sector bancario, que están respaldados por ciertos medios jud...
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El presidente de Perú, Alan García, rechazó ayer la posibilidad de un golpe militar como consecuencia del debate sobre la ley de nacionalización del sector financiero privado y de su jubilación política en 1990. El Jefe del Estado peruano negó ambas eventualidades en los discursos pronunciados durante la inauguración de unas obras en Lima.
Al referirse a las denuncias formuladas en el Senado peruano el pasado jueves sobre la preparación de un compló golpista por parte de sectores que se verán afectados por la expropiación del sector bancario, que están respaldados por ciertos medios judiciales, el presidente peruano dijo que "quienes afirman que se pretende comprar a las fuerzas armadas están injuriando a una institución respetable".Respecto a las versiones dadas por las agencias internacionales de noticias sobre la amplia entrevista concedida por Alan García a EL PAÍS y publicada el pasado viernes, en la que se subrayan las manifestaciones presidenciales sobre su retirada de la política, Alan García puntualizó que se trataba de una interpretación literaria que pretende jubilarlo dentro de tres años.
"Los políticos no conocemos el retiro ni la jubilación, y esto sólo puede producirse con la muerte, aunque ésta signifique un ejemplo para seguir luchando", dijo, para agregar a continuación: "Para 1990 seré un presidente jubilado de 40 años, pero de ninguna manera seré un político jubilado".
El fantasma del golpe de Estado surgió hace tres días cuando el senador de izquierdas Javier Díez Canseco denunció la existencia de un compló contra el orden constitucional con la participación de algunos representantes del poder judicial y de los más poderosos grupos económicos, afectados por las nacionalizaciones que ahora se están discutiendo en el Senado. Esta denuncia fue apoyada por dos senadores del partido gubernamental, Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA).
El ministro de la Guerra, general Jorge Flores Torres, replicó que las fuerzas armadas peruanas tienen pleno respeto por la democracia.
Entre tanto, informaciones oficiosas publicadas la víspera en el matutino limeño La RepúbIica señalan que el tribunal militar que trabaja a puerta cerrada en el caso de las matanzas ocurridas en tres penales limeños el año pasado puede procesar a un coronel de la Guardia Republicana, Rolando Cabezas Alarcón, y solicitar que sea condenado a 20 años de prisión, y acusar de negligencia a un general del Ejército, Jorge Rabanal Ortega.