40 años de dedicación a la química de los productos naturales

Antonio González González, químico canario de 68 años, vio rota ayer su inalterable paz familiar tras recibir la llainada telefónica de Severo Ochoa, presidente del jurado del Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, para comunicarle, 15 minutos antes que lo anunciara la radio, la concesión de este galardón que ha de recibir de manos del heredero de la Corona el próximo mes de octubre en Asturias. El doctor González, que vive en La Laguna (Tenerife), la ciudad de la que hoy es alcalde uno de sus hermanos, recordó ayer su resistencia a abandonar las islas y su voca...

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Antonio González González, químico canario de 68 años, vio rota ayer su inalterable paz familiar tras recibir la llainada telefónica de Severo Ochoa, presidente del jurado del Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica, para comunicarle, 15 minutos antes que lo anunciara la radio, la concesión de este galardón que ha de recibir de manos del heredero de la Corona el próximo mes de octubre en Asturias. El doctor González, que vive en La Laguna (Tenerife), la ciudad de la que hoy es alcalde uno de sus hermanos, recordó ayer su resistencia a abandonar las islas y su vocación universitaria.

"Este premio es mi último servicio a la universidad (de La Laguna y a la investigación canaria. Ojalá sirva para que los jóvenes científicos dispongan de más medios", declaró. La comunidad autónoma le había distinguido anteriormente con el primer Premio Canarias. El presidente del Ejecutivo autónomo, Jerónimo Saavedra, consideró ayer que se había hecho justicia con un gran investigador.

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El premiado mostró su entusiasmo por el hecho de que la distinción lleve el nombre del príncipe Felipe, ya que se siente personalmente vinculado a la familia real, después de que el rey Juan Carlos le designara en 1977 senador real. "Fue algo que no esperaba y ahora ha vuelto a repetirse la historia".

El Parlamento autónomo de Canarias lo había propuesto ya como candidato para una edición anterior del Príncipe de Asturias, pero el interesado sugirió que le retiraran al ser nominado también su profesor Lora Tamayo. Ahora, el jurado ha querido premiar sus más de 40 años de dedicación a la química de los productos naturales, dentro de la cual ha investigado plantas marinas y terrestres para el descubrimiento de sustancias con efectos farmacológicos, especialmente orientados a la curación del cáncer. Hasta el momento ha conseguido con su equipo de colaboradores aislar un importante repertorio de productos potencialmente anticancerígenos, experimentados en animales, y otros con propiedades anticonceptivas. "Nuestro trabajo ha cubierto el plano teórico, hemos profundizado en la biogénesis de las sustancias naturales, para conseguir en el laboratorio el proceso de formación de estos productos en las plantas. Gracias a nuestros avances se han creado nuevos antibióticos. La aplicación futura de estos hallazgos abre muchas expectativas".

Antonio González se especializó en Cambridge entre los años cuarenta y cincuenta y comenzó en La Laguna, de cuya universidad fue rector, su labor científica en un cuarto, con una silla y una mesa en la calle de San Agustín", junto con el doctor Calero de Vera, compañero de estudios, y uno de sus profesores, Tomás Quintero. En la, actualidad es miembro de la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales y del Instituto para el Desarrollo de la Química en los países en vías de desarrollo, organismo de la Unesco.

Fundó el Instituto de Productos Naturales Orgánicos (IPNO), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, a cuya dirección debió renunciar recientemente para seguir al frente del Instituto Universitario de Química Orgánica de La Laguna. "Estos días he presentado la dimisión de este centro, pero aún el rector no la ha aceptado". Prevé jubilarse a finales de este año, aunque ya ha sido propuesto como profesor de mérito para continuar su labor docente.

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