El Tercer Mundo nunca pagará su deuda externa, según Luis Angel Rojo

ENVIADO ESPECIAL Luis Ángel Rojo, director general del Banco de España, afirmó ayer en Santander que "nadie se cree hoy que los países del Tercer Mundo vayan a pagar algún día su enorme deuda exterior" y consideró que el problema del endeudamiento del Tercer Mundo se reduce hoy a encontrar fórmulas de "cómo no se va a pagar" el mismo. Rojo opinó que la actual tendencia a la baja del dólar es "sólida" y no meramente coyuntural, ya que un país, aunque sea Estados Unidos, no puede vivir permanentemente con los volúmenes actuales de, sus déficit fiscal y exterior.

El catedrático de Teoría E...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

ENVIADO ESPECIAL Luis Ángel Rojo, director general del Banco de España, afirmó ayer en Santander que "nadie se cree hoy que los países del Tercer Mundo vayan a pagar algún día su enorme deuda exterior" y consideró que el problema del endeudamiento del Tercer Mundo se reduce hoy a encontrar fórmulas de "cómo no se va a pagar" el mismo. Rojo opinó que la actual tendencia a la baja del dólar es "sólida" y no meramente coyuntural, ya que un país, aunque sea Estados Unidos, no puede vivir permanentemente con los volúmenes actuales de, sus déficit fiscal y exterior.

El catedrático de Teoría Económica de la Universidad Complutense de Madrid intervino ayer en el ciclo de conferencias que sobre Tendencias y Problemas de la Economía Europea se inició en la Universidad, Internacional Menéndez Pelayo. Las rotundas afirmaciones del que es director general del Banco de España sobre el endeudamiento del Tercer Mundo, llamaron la atención, aunque luego el profesor matizó las mismas al señalar que, durante un período ,transitorio, que durará toda la década de los 80, las naciones deudoras tendrán que hacer frente al principal de su deuda con el fin de dar tiempo a los bancos acreedores, fundamentalmente a, los norte,americanos, para realizar previsiones de estos créditos en sus activos y balances.

Lá existencia de una rígida normativa federal norteamericana, que fuerza a los bancos estadouni denses a declarar fallido un crédi to en el que no se han cobrado los intereses trimestrales, es el principal obstáculo a una consideración diferente del problema del endeu damiento del Tercer Mundo. En cualquier caso, señaló Rojo, las reclamaciones de algunas naciones deudoras para que se condone la deuda, por medio de algún instrumento de gracia, no van hoy día a ninguna parte y es curioso com probar que los líderes latinoamericanos que las reclaman se olvidan de sus propias palabras una vez que han pasado los períodos electorales o que se han enfrentado durante algún tiempo a las negociaciones con las entidades acreedoras o el Fondo Monetario Inter nacional (FMI).

Cuestión de tiempo

Para Rojo, lo que hace pensar que nunca se pagará el principal de la deuda del Tercer Mundo es su considerable volumen, que hace prácticamente imposible que las naciones en vías de desarrollo generen los suficientes fondos para afrontarlo. "Es una cuestión de tiempo", dijo Rojo, "de forma que los bancos puedan provisionar estos créditos en sus activos". Las negociaciones actuales van, en ese sentido, encaminadas a ganar tiempo de forma que "una vez que se amorticen estos créditos, comenzarán negociaciones encaminadas a cancelar la deuda". Según Rojo, la forma en que ésto se haga es decisiva para que el flujo de financiación al Tercer Mundo continúe llegando en el futuro.

El profesor Rojo achacó el origen de la deuda exterior actual del Tercer Mundo a los errores de la política norteamericana y a la ceguera de las instituciones privadas que prestaron el dinero, aparte de la "desastrosa" política económica seguida por las naciones endeudadas. "Si el Gobierno estadounidense, no hubiese insistido en dar un protagonismo a la banca privada en el reciclaje de los denominados petrodólares en los años posteriores a las dos crisis del petróleo y si el Fondo Monetario Internacional hubiese tomado un papel más activo eri dicha función, muchos problemas se hubiesen evitado", declaró Rojo.

El catedrático de Teoría Económica, cuyas opiniones no proliferan habitualmente pese al respeto con el que son acogidas, manifestó que el dólar parece haber iniciado una "tendencia sólida" a la baja en los últimos meses y no una mera inflexión coyuntural. Para Rojo, es fundamental que esta tendencia a la baja no sea traumática ya que crearía más problemas de los que resolvería. Y, en este sentido, añadió que la baja de la cotización de la moneda norteamericana es consecuencia directa de los enormes déficit acumulados por la economía estadounidense, tanto en el terreno fiscal (más de 100.000 millones de dólares en 1984 y por encima de los 125.000 millones en 1985, según se espera) como en el exterior. "Ningún país puede soportar permanentemente estos déficit sin que se resienta su moneda", dijo.El director general del Banco de España, dentro de su exposición sobre "Europa y la hegemonía americana", vista desde un punto de vista histórico, declaró que la política expansionista aplicada en Estados Unidos, que ha permitido un crecimiento espectacular en los últimos dos años, no es exportable a los países europeos.

"Ninguna nación europea puede basar su crecimiento y expansión en políticas fiscales del tipo aplicado en Estados Unidos. Las consecuencias, serían muy distintas, ya que Estados Unidos ha podido hacer eso durante algún tiempo porque no ha encontrado problemas para financiar el déficit fiscal originado. Claro que, además, ha originado otro déficit, el exterior, y ese sí que se va a ver obligado a corregirlo a, riesgo de ver caer su moneda.

En Europa, el problema hubiera sido aún mayor si se llega a seguir el ejemplo del otro lado del Atlántico", dijo Luis Ángel Rojo.

Archivado En