El Gobierno de Simón Peres crea fundadas esperanzas para una paz árabe-israelí

El acceso de Simón Peres a la presidencia del Gobierno ha sido el catalizador de un proceso diplomático cuyo resultado puede ser la reanudación de las negociaciones de paz árabe-israelí. Se sabía que Egipto, Jordania y Estados Unidos deseaban una victoria del Partído Laborista, con la esperanza de poder desbloquear la situación, que parecía condenada a no variar mientras los líderes del Likud siguieran gobernando Israel.Pese a que las esperanzas de una clara victoria laborista quedaron decepcionadas, la presencia de Peres al frente del Gobierno de unión nacional durante los dos primeros añ...

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El acceso de Simón Peres a la presidencia del Gobierno ha sido el catalizador de un proceso diplomático cuyo resultado puede ser la reanudación de las negociaciones de paz árabe-israelí. Se sabía que Egipto, Jordania y Estados Unidos deseaban una victoria del Partído Laborista, con la esperanza de poder desbloquear la situación, que parecía condenada a no variar mientras los líderes del Likud siguieran gobernando Israel.Pese a que las esperanzas de una clara victoria laborista quedaron decepcionadas, la presencia de Peres al frente del Gobierno de unión nacional durante los dos primeros años y el nombramiento de Isaac Rabin para el Ministerio de Defensa hacen posible el desarrollo de una serie de iniciativas diplomáticas.

En este marco se hallan las manifestaciones del Gobierno israelí favorables a una retirada unilateral de sus fuerzas de Líbano; la visita del subsecretario de Estado norteamericano, Richard Murphy, a Damasco, Jerusalén, Arninan y El Cairo; las conversaciones entre el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Isaac Shamir, y su homólogo egipcio, Ismet Abdul Maguid, en Nueva York, a las que s ¡guió una entrevista entre Shamir y el ministro de Asuntos Exteriores soviético, Andrei Gromiko; la reanudación de relaciones diplomáticas entre Jordania y Egipto, y la visita a Aminandel líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasir Arafat, que se entrevistó con el rey Hussein ayer mismo. A las que hay que añadir el mensaje personal del presidente egipcio, Hosni Mubarac, a Peres, en el que subrayaba el deseo de Egipto de mejorar y estrechar sus relaciones con Israel.

El presidente sirio, Hafez el Asad, ha comunicado a Richard Murphy que comprende el deseo de Israel de reforzar la seguridad de su frontera septentrional antes de realizar la retirada de sus tropas de Líbano. Ésta es la primera vez que Damasco toma nota de los intereses de seguridad israelies en la frontera con Líbano. Hay que destacar el visto bueno de Siria a una mediación norteamericana y el reconocimiento de las necesidades de seguridad de Israel.

Rabin y el jefe del Estado Mayor, general Moshe Levy, estudian los parámetros militares de una eventual retirada israelí, ya que los últimos incidentes en el sur de este país han aumentado la creencia de que la evacuación es una necesidad urgente. Paralelamente, el deseo egipcio de mejorar las relaciones con Isreal está relacionado con la salida de las fuerzas israelíes del sur de Líbano.

Al parecer, el Gobierno de El Cairo enviará un embajador a Tel Aviv inmediatamente después de la evacuación israelí y está dispuesto a estrechar las relaciones entre ambos paises en cuanto se establezca un calendario para la retirada israelí. La reanudación de relaciones diplomáticas egipcio-jordanas no sólo constituye una victoria importante para Mubarak, sino que también hará posible un relanzamiento del proceso de paz árabe-israelí, que no tiene que basarse necesariamente en los acuerdos de Camp David.

Por esta razón, Peres ha evitado situar su apertura hacia Jordania en el marco de Camp David". Al parecer, ya existe un acuerdo tácito entre Peres y Mubarak para el relanzamiento de la idea de unas negociaciones cuatripartitas entre Israel, Egipto, Jordania y los palestinos sin hacer referencia a Camp David. Las conversaciones desarrolladas por Arafat en Amman tienen como objetivo determinar las condiciones en las que la participación palestina en estas negociaciones sería posible.

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