Novelistas de la posguerra

Los escritores Miguel Delibes, de 62 años, y Gonzalo Torrente Ballester, de 71 años, pertenecen a la primera generación de posguerra, ya que sus primeras novelas aparecen en los años cuarenta. Desde entonces, cada nueva publicación, hasta la actualidad, ha confirmado el magisterio de la escritura y su situación en los primeros lugares de la literatura española."A mi edad el obtener este premio supone un honor, una satisfacción y la garantía de que uno no ha estado perdiendo el tiempo del todo a lo largo de 35 años", afirmó Miguel Delibes poco después de conocer que había sido galardonado con e...

Los escritores Miguel Delibes, de 62 años, y Gonzalo Torrente Ballester, de 71 años, pertenecen a la primera generación de posguerra, ya que sus primeras novelas aparecen en los años cuarenta. Desde entonces, cada nueva publicación, hasta la actualidad, ha confirmado el magisterio de la escritura y su situación en los primeros lugares de la literatura española."A mi edad el obtener este premio supone un honor, una satisfacción y la garantía de que uno no ha estado perdiendo el tiempo del todo a lo largo de 35 años", afirmó Miguel Delibes poco después de conocer que había sido galardonado con el premio Príncipe de Asturias. El novelista vallisoletano se enteró de la decisión del jurado cuando se hallaba en el Banco de Bilbao para recoger una medalla conmemorativa del 125 aniversario de esta ciudad. "El director", señaló Delibes, "me dio la enhorabuena y yo pregunté el por qué. Es que acabamos de enterarnos de que le han concedido el premio Príncipe de Asturias, y me enseñó el teletipo donde se recogía la decisión del jurado. Es curioso que uno se entere de estas cosas en un banco", informa Luis Miguel de Dios.

El escritor y académico vallisoletano calificó el premio como "simpático y otorgado por una fundación simpática y prestigiosa y por una autonomía que me cae simpática, como es la asturiana". Delibes señaló que el hecho de compartir el galardón con Torrente Ballester -"con quien no he podido hablar todavía porque su teléfono debe estar tan bloqueado como el mío"- era para él motivo de doble satisfacción: "El nombre de Torrente Ballester da mayor realce al premio y, por otra parte, como es mayor que yo y tiene más labia se encargará del oportuno discurso en el momento de la recepción". "Creo", añadió, "que Torrente, por planteamientos distintos y a su manera ha hecho con Galicia lo que yo trataba de hacer con Castilla. Las dos zonas andan a la par en cuanto a necesidades de atención, aunque en Galicia hay una mayor conciencia regionalista".Gonzalo Torrente Ballester (El Ferrol, 1910), es un escritor que viene de El Quijote y que, por tanto, centra, la literatura en la imaginación y en la destrucción de los mitos. Es, además, un escritor antiguo, al que los premios le llegan un poco tarde, "como todas las cosas mías", según declaró el pasado año, cuando recibió el Premio Nacional de Literatura por su última novela, La isla de los jacintos cortados.Torrente Ballester recibió la noticia del premio "con sorpresa y con alegría" cuando firmaba en Alianza Editorial ejemplares de la sexta edición de Los gozos y las sombras. "Ni siquiera sabía que fuera a darse hoy ese premio y me ha cogido sin la menor preparación", dijo felicitándose de compartirlo con Delibes, "por el que muchas veces ya he manifestado mi admiración".

El escritor gallego acababa de hablar con su colega castellano en uno de los pocos momentos que el teléfono de ambos quedó libre ayer por la tarde. "Nos hemos dado la enhorabuena", explicó Torrente Ballester. Para el autor de La saga/fuga de JB, el que el mundo novelístico de Delibes y el suyo sean distintos "enriquece nuestra literatura".Gonzalo Torrente Ballester, que es un escritor de reconocimiento tardío en nuestro panorama literario, niega que recibiese, como se dice en algunas biografías, el Premio Nacional de Literatura en 1939. Ahora escribe poco -"porque soy muy vago", dice-, pero piensa que para el verano podrá dar por finalizada una nueva libro que "no es exactamente una novela, sino mezcla de recuerdos y fantasias sonbre mi infancia". El libro ya tiene título, El valle de las torres mochas.