EI MOMA encuentra sustituto para el "Guernica"

El gran vacío dejado por la ausencia del Guernica en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) lo han intentado paliar sus directivos con la colocación de otra obra de Pablo Picasso, una tela más pequeña, pero con el mismo tratamiento de blancos, negros y grises, llamada El osario.En torno a esta obra, que formó parte de la retrospectiva de obra de Picasso organizada por el MOMA en 1980, se está empezando a crear un nuevo mito que, según los expertos en arte, «demuestra hasta qué punto el museo y la ciudad de Nueva York sufren el síndrome y la nostalgia del Guernica»....

El gran vacío dejado por la ausencia del Guernica en el Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) lo han intentado paliar sus directivos con la colocación de otra obra de Pablo Picasso, una tela más pequeña, pero con el mismo tratamiento de blancos, negros y grises, llamada El osario.En torno a esta obra, que formó parte de la retrospectiva de obra de Picasso organizada por el MOMA en 1980, se está empezando a crear un nuevo mito que, según los expertos en arte, «demuestra hasta qué punto el museo y la ciudad de Nueva York sufren el síndrome y la nostalgia del Guernica».

Realizado en 1945, El osario refleja la misma temática de destrucción y horror ante la violencia de la guerra que el Guernica, del que, según los expertos, es una continuación. El asesinato de una familia en su cocina, que vio Picasso en una película sobre la guerra civil española, o las primeras fotos de los cuerpos amontonados en los campos de exterminio nazi son, según diversas fuentes, los motivos de su inspiración.