La Junta de Andalucía teme un frenazo autonómico

Dentro de una generalizada actitud de cautela, fuentes solventes de la Junta de Andalucía no ocultan su temor de que una presumible derechización de la política del Gobierno, tras la dimisión de Adolfo Suárez, influya de modo negativo en el proceso autonómico andaluz. El propio presidente de la Junta, Rafael Escuredo, sin presuponer qué política haría Calvo Sotelo, en caso de superar la investidura parlamentaria, mostró su preocupación ante la posibilidad de que se produzca un nuevo frenazo a las aspiraciones autonómicas andaluzas.Actualmente, las fuerzas políticas dirigen su inquietud en dos ...

Dentro de una generalizada actitud de cautela, fuentes solventes de la Junta de Andalucía no ocultan su temor de que una presumible derechización de la política del Gobierno, tras la dimisión de Adolfo Suárez, influya de modo negativo en el proceso autonómico andaluz. El propio presidente de la Junta, Rafael Escuredo, sin presuponer qué política haría Calvo Sotelo, en caso de superar la investidura parlamentaria, mostró su preocupación ante la posibilidad de que se produzca un nuevo frenazo a las aspiraciones autonómicas andaluzas.Actualmente, las fuerzas políticas dirigen su inquietud en dos direcciones por un lado, la política de transferencias a la Junta, considerada lenta y discriminatoria para Andalucía, y, por otro, la fijación definitiva de un calendario concreto para culminar el proceso autonómico con la entrada en vigor del Estatuto y la convocatoria de elecciones al Parlamento regional. Sin descartar el agravamiento de la polémica sobre el papel de las diputaciones provinciales en la futura comunidad autónoma, que enfrenta a la izquierda con UCD.

En otro orden de cosas, en medios políticos próximos al Partido Socialista de Andalucía (PSA) se estima muy probable que este partido vote negativamente la investidura de Leopoldo Calvo Sotelo como nuevo presidente del Gobierno. Un miembro del Comité Ejecutivo nacional del PSA confesaba ayer a EL PAIS: «Si la votación fuese esta misma tarde, votaríamos no». Por su parte, Alejandro Rojas-Marcos ha asegurado, en declaraciones a Televisión Española, que los dos votos favorables del PSA a Suárez habían sido absolutamente excepciones y en función de beneficios para el pueblo andaluz (la obtención del Grupo Parlamentario Andalucista y eI pacto con Martín Villa para el desbloqueo autonómico), pero que lo normal en un partido de izquierda es votar en contra de un Gobierno de UCD.

El comité nacional del PSA se reunirá mañana, domingo, esperándose una toma de postura, tras el informe que el propio Rojas-Marcos deberá hacer de su entrevista con el Rey y sus contactos con otros partidos en la capital de España.

Finalmente, el ex ministro Manuel Clavero, presidente de Unidad Andaluza (UA) y miembro del Grupo Mixto del Congreso de Diputados, explicó a este periódico que su actitud en el debate de investidura dependerá del progama que presente el candidato Calvo Sotelo, y en especial, de lo que haga referencia a Andalucía. «Creo que el derecho de Andalucía a su autonomf a está tan claro que ningún Gobierno se atrevería a ponerlo en duda», predijo Clavero.