Cartas al director

Camas, sólo "de pago"

Se ha llegado a un grado tal de deshumanización de la medicina que se cataloga al paciente como un objeto. Quiero contar un caso que hoy es triste realidad de este país. En este caso le ha tocado a Jesús López de Castro, trabajador de casi sesenta años de edad enfermo de vesícula, y que desde hace ya cuatro meses está intentando que le internen en el Hospital Clínico de San Carlos, de Madrid.Cada vez que le someten a reconocimiento, el médico dice: «Hay que operar, es urgente», pero en la administración del hospital le dicen: «Lo sentimos, pero no hay camas libres, ya le avisaremos».

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Se ha llegado a un grado tal de deshumanización de la medicina que se cataloga al paciente como un objeto. Quiero contar un caso que hoy es triste realidad de este país. En este caso le ha tocado a Jesús López de Castro, trabajador de casi sesenta años de edad enfermo de vesícula, y que desde hace ya cuatro meses está intentando que le internen en el Hospital Clínico de San Carlos, de Madrid.Cada vez que le someten a reconocimiento, el médico dice: «Hay que operar, es urgente», pero en la administración del hospital le dicen: «Lo sentimos, pero no hay camas libres, ya le avisaremos».

Se pregunta Jesús, que lleva toda la vida cotizando a la Seguridad Social, que si hay derecho a lo que le están haciendo. El caso es que en el sector privado de ese hospital hay camas libres, pero, claro, sería mucho honor que un trabajador ocupase una de esas habitaciones. Mientras tanto, Jesús se retuerce de dolor en la alcoba de su casa. Y este no es un caso aislado, sino que es uno de los muchos que se dan a diario. A uno, cuando oye hablar al ministro de Sanidad de reforma sanitaria y de la seguridad social y de metas alcanzadas, no le queda más remedio que «rabiar de impotencia» y pedir que se extingan de una vez los demagogos, que de una vez por todas se dejen de palabras y que esto funcione. Pero Jesús, y con él muchos ciudadanos más, se sigue preguntando si hay derecho a lo que le están haciendo./

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