Tres actores

Tres jóvenes actores -Roger Alvarez, Piero Falla, Cándida Tena-intentan un pequeño espectáculo musical: su título, Soñando bajo la lluvia... con paraguas rotos, indica ya la distancia del sueño a la realidad, de lo imaginado a lo posible. Fábrica de sueños llamó Ehremburg, en un libro famoso, a la industria cinematográfica de Hollywood. El ensueño cinematográfico es el tema de esta caricatura, que intenta ser nostálgica, tierna, ingeniosa. Hay una parodia del cine mudo, unas breves imitaciones de estrellas, mucha música -al piano-, la inevitable réplica de Charlot y otra, final, ...

Tres jóvenes actores -Roger Alvarez, Piero Falla, Cándida Tena-intentan un pequeño espectáculo musical: su título, Soñando bajo la lluvia... con paraguas rotos, indica ya la distancia del sueño a la realidad, de lo imaginado a lo posible. Fábrica de sueños llamó Ehremburg, en un libro famoso, a la industria cinematográfica de Hollywood. El ensueño cinematográfico es el tema de esta caricatura, que intenta ser nostálgica, tierna, ingeniosa. Hay una parodia del cine mudo, unas breves imitaciones de estrellas, mucha música -al piano-, la inevitable réplica de Charlot y otra, final, de Cantando bajo la lluvia.Lo que queda de todo ello es la presencia de los tres actores, que trabajan denodadamente y que tienen bastantes posibilidades. Uno de ellos, Roger Alvarez, con potencia y buen timbre de voz, que podrá educar mejor, con condiciones mímicas y vis cómica. Sin desdoro para los otros dos, que muestran, sobre todo en la primera parte, buenos rasgos de intérpretes.

La experiencia que acumulan en este trabajo les será útil en el futuro: confiemos en que, más adelante de sus carreras, lo consideren como una ingenuidad, más propia de un salón de colegio a fin de curso que de un teatro comercial. Empresarios de compañía y directores de escena deberían ir a verles: en esta hora de tanta dificultad para formar buenos repartos encontrarían en ellos unos buenos actores con posibilidades. Van a salir adelante.