Inquietud en Europa por la prevista instalación de misiles norteamericanos

La instalación de 572 nuevos misiles norteamericanos equipados con armamento nuclear en cinco países europeos miembros de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) puede originar serías diferencias políticas en varias capitales europeas, según medios políticos de la capital belga.

, Nadie discute, a nivel estratégico, la necesidad de tal tipo de armamento (misiles cruise y pershings) para hacer frente al peligro de los cohetes soviéticos de alcance medio SS-20. Los expertos de la OTAN analizan actualmente en Bruselas las modalidades técnicas para dotar a l...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La instalación de 572 nuevos misiles norteamericanos equipados con armamento nuclear en cinco países europeos miembros de la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) puede originar serías diferencias políticas en varias capitales europeas, según medios políticos de la capital belga.

Más información

, Nadie discute, a nivel estratégico, la necesidad de tal tipo de armamento (misiles cruise y pershings) para hacer frente al peligro de los cohetes soviéticos de alcance medio SS-20. Los expertos de la OTAN analizan actualmente en Bruselas las modalidades técnicas para dotar a la Alianza Atlántica de tal tipo de armamento, como contrapeso al arsenal nuclear soviético. Sin embargo, la decisión de aceptar la instalación de nuevo armamento nuclear en territorio europeo va a provocar tensiones políticas y populares en los países que acogerán el nuevo material militar: Alemania, Gran Bretaña, Italia, Bélgica y Holanda. La OTAN decidirá, posiblemente, la fabricación e instalación de su nueva generación de material nuclear en la sesión ministerial de invierno, prevista para primeros del mes de diciembre en Bruselas.Sin relación directa

«No existe una relación directa entre la aprobación de los acuerdos SALT II (limitación de armamento nuclear estratégico) por el Senado de Estados Unidos y la aceptación por parte de Bélgica de nuevos misiles nucleares», afirmó Henry Simonet, ministro belga de Asuntos Exteriores, a su regreso de una gira por Washington y Nueva York.

Añadió, empero, que los Gobiernos europeos difícilmente podrían admitir un refuerzo de su material bélico nuclear, si no hay ratificación del Tratado SALT II. Simonet precisó que el Gobierno belga todavía no ha deliberado sobre la decisión de acoger en su territorio nacional los nuevos misiles pershings pero pocos dudan en Bruselas que Bélgica -sede de las instituciones atlánticas- queda al margen de la nueva estrategia atómica de la OTAN.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En