Inaugurada la sala argentina del Museo de América

El ministro de Cultura, Pío Cabanillas, acompañado por el secretario de Estado de Cultura y por el director general del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos inauguró en el museo de América (Ciudad Universitaria) las nuevas instalaciones de la sala dedicada a Argentina. Al acto asistieron el presidente del Centro Iberoamericano de Cooperación y el embajador de la República de Argentina.La nueva sala contiene testimonios históricos, artísticos y culturales de la nación argentina, desde la vida campera y el mundo del gaucho hasta muestras de arqueología de artesanía y mobiliario, de arte relig...

El ministro de Cultura, Pío Cabanillas, acompañado por el secretario de Estado de Cultura y por el director general del Patrimonio Artístico, Archivos y Museos inauguró en el museo de América (Ciudad Universitaria) las nuevas instalaciones de la sala dedicada a Argentina. Al acto asistieron el presidente del Centro Iberoamericano de Cooperación y el embajador de la República de Argentina.La nueva sala contiene testimonios históricos, artísticos y culturales de la nación argentina, desde la vida campera y el mundo del gaucho hasta muestras de arqueología de artesanía y mobiliario, de arte religioso y documentos históricos del general San Martín. Este material ha sido aportado por la Asociación de Amigos de la Sala de Argentina del museo de América.

El director del museo destacó la riqueza artística de la sala, que ofrece a los investigadores y estudiosos un fondo documental para conocer la historia argentina. Añadió que el museo ha querido ser escaparate, en Europa, del mundo hispánico y forjador de vocaciones americanistas. También intervinieron la presidenta de la asociación y el embajador de Argentina, quien se refirió a la acción civilizadora, evangélica y lingüística de España en América.

Cerró el acto el ministro de Cultura para expresar su gratitud a unas personas que han hecho de la sala una ventana abierta a la visión viva de Argentina. Manifestó que la sala evocaba en pequeña escala el esplendor cultural de Argentina, desde la unidad que nos es común, y por cuya senda -en frase del gaucho- no hay nadie que se pierda.