Ingrid García-Jonsson: “Ser adulto hoy es: ‘No voy a tener casa ni trabajo fijo”

La actriz sevillana se estrena como directora con un documental sobre los jóvenes españoles y su actitud frente a la vida

Ingrid García-Jonsson, el viernes, en la cafetería The Fix de Madrid.Samuel Sánchez

Este año ha estrenado Veneciafrenia (Álex de la Iglesia), Camera Cafe: La película (Ernesto Sevilla) y ...

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Este año ha estrenado Veneciafrenia (Álex de la Iglesia), Camera Cafe: La película (Ernesto Sevilla) y Nosotros no nos mataremos con pistolas (Maria Ripoll). Esta semana cumple 31 años, una década en la profesión y debuta como directora con un documental de 46 minutos, Nómadas, que se puede ver en Movistar +, YouTube y Prime Video. Ingrid García-Jonsson, actriz y ahora realizadora, sevillana de madre sueca, reconoce que aunque lo que más le gusta es estar tumbada en casa viendo vídeos en YouTube, le cuesta estar quieta. Nos cita en una cafetería del centro de Madrid para explicar por qué.

Pregunta: ¿Cómo la lían para dirigir?

Respuesta. Me llaman y me lo ofrecen tal cual. Así de fácil. Y como al plantearme el tema me pareció interesante y yo llevaba mucho tiempo diciendo en público que quería dirigir, pensé que si lo he pedido y me viene, tengo que aceptarlo

P. Así que lo soltó para ver si colaba y coló.

R. Sí, habían visto entrevistas mías y me conocían a mí, mi curro y mi manera de pensar, y pensaban que podía encajar con la historia que había que contar

P. Es decir, que la idea original le viene dada.

R. Viene a mí. “Tienes que hacer un documental sobre los nómadas actuales y tienen que salir 15 personajes. Apáñatelas como puedas. Tienes siete días para rodar y un mes para montar”.

P. ¿Qué es un nómada?

R. Ahora mismo ocurre prácticamente en todo el mundo, pero lo acotamos a gente de entre 20 y 30 años que se incorporan a la vida adulta y de pronto se dan cuenta de que ya no es algo estable del tipo: “Estudio, trabajo, me caso y me muero en mi casa”. Que en realidad es: “No voy a tener casa, no voy a tener trabajo fijo, probablemente tampoco tenga pareja o al menos, una convencional. Entonces a ver cómo me busco yo las habichuelas aquí en este sistema”. Y además hacerlo de una manera que no sea como una condena.

P. Llama la atención que el presupuesto inicial es: “Esto es un desastre”. Pero ellos luego no son nada agónicos. ¿Es un retrato generacional?

R. No lo sé, no entrevisté a toda la generación. No quería hacer un mensaje ultrapositivo y que sonara demagogo y falso, pero quería que fuera inspirador de alguna manera, que diera consuelo y que la gente disfrutara viéndolo. Intenté generar un sitio donde estuvieran a gusto y tranquilos. Si hubiera hablado con ellos desde lo negativo, quizá me habrían contestado de otra manera.

P. No tienen esperanza en el futuro, pero tampoco les agobia.

R. A mí eso me ha dado mucho consuelo porque el futuro me abruma. Me asusta un montón lo que pueda venir. Ver que hay gente que se supone que es consciente de lo que nos viene, pero que está más por cambiarlo o solucionarlo y aparte por vivir el presente y disfrutar de lo que tiene me resulta bastante inspirador.

P. ¿Querría dirigir más o se le han quitado las ganas?

R. Quiero dirigir, pero me gustaría disponer de muchísimo más tiempo para hacerlo con más calma, porque esto ha sido muy estresante y ya no duermo bien. Antes dormía 10 horas del tirón, se acabó.

P. En Camera Café aparecía irreconocible.

R. Es liberador. Cuando llegaba la gente me trataba como si fuera otra persona. Tenía que recordar de vez en cuando que yo estaba dentro. Pero es muy guay poder jugar de esa manera y actuar como un tío, desprenderme de todo.

La actriz, después de la entrevista.Samuel Sánchez

P. Dijo en una entrevista que las actrices estaban “condenadas” a salir monas.

R. Juega a tu favor si eres guapa y das bien en cámara. Y se busca siempre que seas agradable de ver. Son códigos. Para mí es importante poder desprenderme de eso, porque si estoy ocupada en mi imagen y en cómo se me ve, me desocupo de lo que es importante, que es la escena.

P. ¿Trabaja en el extranjero?

R. Sí, pero no me sale por España. Me sale por Suecia. No puedo hacer de española internacionalmente porque no funciona. Lo he intentado muchas veces. No se lo cree nadie.

P. ¿Qué rueda fuera?

R. Estuve rodando en Budapest hace una semana. Tengo un papelillo en una serie de vikingos que no sé si puedo contar mucho. Y esto seguro que no lo puedo contar: ahora me voy a XXX ―pon eso, XXX― a rodar otra serie. Y acabo de hacer prueba para una cosa también, que igual me voy a rodar a Oslo. Está todo el mundo rodando en todas partes y ya no es tan necesario vivir en un sitio para conseguir un papel.

P. ¿Eso es ser nómada?

R. Claro. Sí, sí, sí, totalmente. Es que la cosa ya no está tan centralizada. Ya te digo que yo trabajé en un proyecto a 10.000 kilómetros de distancia. Todas las pruebas que he hecho han sido online y todo el diálogo que he tenido con el director ha sido siempre gracias a internet. En ningún momento se me ha exigido estar ahí.

P. ¿ Algún estreno pendiente?

R. No. Tengo lo que he contado e igual entro a dirigir un videoclip de un grupo.

P. ¿Otra vez en la dirección?

R. Mira, todo lo que vaya viniendo hacia mí... Todo lo que me digan “¿quieres?”, quiero. Es así. A todo lo que venga como facilito: sí. Porque la vida tiene que ser fácil.


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