‘Lizzie’: un mito del feminismo gótico

Chloë Sevigny y Kristen Stewart destacan en este drama que reconstruye la matanza de la célebre parricida Lizzie Borden

Kristen Stewart y Chloë Sevigny, en 'Lizzie'.

La figura de Lizzie Borden ha circulado como un sangriento fantasma gótico entre la página negra de Estados Unidos y la iconografía feminista. Una parricida que se lio a hachazos con su padre y su madrastra en un crimen que puso la piel de gallina a la sociedad de la época. Aunque Borden fue declarada inocente —el juez creía que una mujer de su clase era incapaz de semejante atrocidad—, la sombra de la duda la dejó señalada de por vida y la cultura popular se apropió de su hacha y de su nombre.

Para unos, una sang...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La figura de Lizzie Borden ha circulado como un sangriento fantasma gótico entre la página negra de Estados Unidos y la iconografía feminista. Una parricida que se lio a hachazos con su padre y su madrastra en un crimen que puso la piel de gallina a la sociedad de la época. Aunque Borden fue declarada inocente —el juez creía que una mujer de su clase era incapaz de semejante atrocidad—, la sombra de la duda la dejó señalada de por vida y la cultura popular se apropió de su hacha y de su nombre.

Para unos, una sanguinaria perturbada; para otros, una mujer oprimida por un padre que no la dejaba respirar. De la banda de heavy metal Lizzy Borden, a la cineasta underground Lizzie Borden, los sucesos ocurridos en un caluroso día de agosto de finales del siglo XIX han inspirado además infinidad de libros, alguna serie y varias obras de teatro. También atrajo a la productora y protagonista de este filme, Chloë Sevigny, que en Lizzie recrea la angustiosa trastienda de un crimen cuya lectura no deja de dar vuelcos.

Lizzie arranca el día del famoso crimen para luego rebobinar al claustrofóbico y machista hogar de los Borden, dominado por un padre cuya tiranía se ceba con su hija más díscola e independiente. Pero la película dirigida por Craig William Macneill se centra en la amistad entre Lizzie, en la piel de Sevigny, y Maggie, la sirvienta que interpreta Kristen Stewart. La química entre ambas actrices, con una Stewart superior en su ensimismada clave dramática, es lo mejor de una película que intenta indagar (y en gran medida lo logra) en los mecanismos del endiablado rompecabezas de una familia marcada por los abusos del padre. Un hostigamiento que aquí se mide con un desquiciado doble asesinato que lejos de idealizarse se muestra con toda su crudeza. Lizzie es una película que no responde a todas las preguntas, pero, poco a poco, va cogiendo fuerza y cuerpo hasta transmitir al espectador la irrespirable opresión y el maltrato psicológico y físico de un hogar enfermo.

LIZZIE

Dirección: Craig William Macneill. 

Intérpretes: Chloë Sevigny, Kristen Stewart, Jamey Sheridan, Fiona Shaw.

Género: drama. Estados Unidos, 2018.

Plataforma: Filmin.

Duración: 105 minutos. 

Estreno: 21 de enero.

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Sobre la firma

Más información

Archivado En