Julian Opie planta dos esculturas monumentales en Valencia y atrapa el movimiento del caminante urbano

Dos grandes esculturas de acero, de 12 metros de altura, muestra a dos figuras humanas en una posición cotidiana y una actitud tal vez reflexiva. Parecen estar esperando a alguien en la calle, con los brazos cruzados, o a que el semáforo se ponga verde, apoyado el peso del cuerpo sobre una pierna. Son las dos nuevas obras que el artista londinense Julian Opie ha creado ex profeso para plantarlas en la plaza del Patriarca de Valencia, frente a la Nau, la sede histórica de la Universidad ...

Dos grandes esculturas de acero, de 12 metros de altura, muestra a dos figuras humanas en una posición cotidiana y una actitud tal vez reflexiva. Parecen estar esperando a alguien en la calle, con los brazos cruzados, o a que el semáforo se ponga verde, apoyado el peso del cuerpo sobre una pierna. Son las dos nuevas obras que el artista londinense Julian Opie ha creado ex profeso para plantarlas en la plaza del Patriarca de Valencia, frente a la Nau, la sede histórica de la Universidad de Valencia.

Dentro, en el claustro de la institución con 520 años de antigüedad, el hieratismo de la estatua del humanista Juan Luis Vives dialoga con el dinamismo de las obras del popular creador de personas que se mueven, caminan, de colores primarios y rasgos esquemáticos, propias del cómic o el videojuego. En el interior del centro cultural, ese movimiento no solo se intuye sino que se representa con dibujos animados, vídeos y pantallas de LED que trasladan de inmediato el mundo creativo, fácilmente identificable.

Los 47 retratos de personajes, amigos, familiares y colaboradores del artista forman parte de la exposición que se ha presentado este jueves en Valencia, organizada por la Fundación Hortensia Herrero. Una muestra llamativa tanto por el tamaño de las obras como por la conjunción de numerosas piezas en tres escenarios de uno de los representantes de la nueva figuración británica de mayor proyección internacional. “Yo reflejo lo que veo, retrato a cualquiera que pase por la calle, no tengo un estereotipo de si las personas están felices o no, tiene problemas o no. Es solo el flujo de la humanidad”, ha explicado Opie este jueves. “Somos uno de los mejores caminantes y corredores en el mundo y este proceso del movimiento del cuerpo es la mejor manera de dibujar”, ha añadido, en compañía de Hortensia Herrero, vicepresidenta de Mercadona, de su marido Juan Roig, presidente de la cadena de supermercados, y de la rectora, Mavi Mestre.

La figura humana es la protagonista absoluta de la muestra que se puede ver hasta el 19 de septiembre. Opie toma fotografías, las trata en el ordenador, la pinta y las convierte en esculturas de dos metros de altura, por ejemplo. Es el caso de los cuatro caminantes que escoltan al pensador humanista. “Estas piezas parecen, más que esculturas, dibujos en tres dimensiones. Y es que toda la obra del creador británico tiene su origen en el dibujo, el primer pensamiento visual de todo artista”, ha detallado el comisario de la exposición, Javier Molins.

La muestra se gestó “hace un año en Lisboa”, cuando Hortensia Herrero le propuso traer su obra a la ciudad del Turia, según señaló Opie. “Muchas veces me proponen organizar retrospectivas, pero prefiero hacer exposiciones ex profeso para el espacio. Es el caso de esta muestra para la que he creado nuevas figuras, como las de la plaza del Patriarca, las más grandes hasta la fecha. Es un riesgo crear obras para cada lugar, pero lo asumo”.

Herrero ha resaltado que es “muy gratificante para la fundación poder acercar el arte de Julian Opie, uno de los mejores artistas del mundo, a los valencianos”, sobre todo “en mayo de 2021”, con las dificultades que comporta la pandemia. La mecenas apuntó que las obras del futuro centro de arte contemporáneo, que llevará su nombre en un palacete de la cercana la calle del Mar están cogiendo “velocidad de crucero”. La rectora ha destacao la “vocación internacional” de la Universidad de Valencia, como demuestra albergar la exposición de Opie, en la que también ha colaborado el Ayuntamiento de la ciudad.