Normalizar la esquizofrenia

Una película mala aunque bienintencionada que pretende representar una nueva diversidad psíquica alejada de los oscuros clichés asociados a las enfermedades mentales

Taylor Russell y Charlie Plummer, en 'Palabras en las paredes del baño'. En vídeo, el tráiler de la película.

Palabras en las paredes del baño es una película de instituto chico-conoce-chica destinada a normalizar la esquizofrenia entre el público más joven y contribuir desde la pantalla a reducir su estigma social. Una película bienintencionada que pretende representar una nueva diversidad psíquica alejada de los oscuros clichés asociados a las enfermedades mentales. Sin embargo, su ejecución es tan ñoña y poco interesante que todos sus buenos propósitos resultan inanes. Solo la actriz Taylor Russell saca brillo de su colegiala inteligente, pobre y capaz de no temer a nada.

Basada en el...

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Palabras en las paredes del baño es una película de instituto chico-conoce-chica destinada a normalizar la esquizofrenia entre el público más joven y contribuir desde la pantalla a reducir su estigma social. Una película bienintencionada que pretende representar una nueva diversidad psíquica alejada de los oscuros clichés asociados a las enfermedades mentales. Sin embargo, su ejecución es tan ñoña y poco interesante que todos sus buenos propósitos resultan inanes. Solo la actriz Taylor Russell saca brillo de su colegiala inteligente, pobre y capaz de no temer a nada.

Basada en el libro del mismo título de Julia Walton, la película está narrada por su personaje principal, un adolescente diagnosticado que hace un recuento pormenorizado de todas sus patologías, terapias y medicaciones. Su lucha contra el aislamiento social y la incomprensión familiar está tratada con un tono entre jocoso y dramático que en algunos momentos recuerda a la voz de Rue (Zendaya) en Euphoria y su pizpireta relación con la interminable lista de trastornos de su personaje, que van del déficit de atención a la ansiedad o la bipolaridad.

En ese tú a tú con la enfermedad y el espectador, Palabras en las paredes del baño persigue una complicidad que nunca llega. Pese a su premiado historial de niño-actor, Charlie Plummer no resulta nada empático y en la peor decisión de toda la película, las tres voces de su cerebro están representadas por unos personajes de carne y hueso que podrían haber tenido la gracia propia de las emociones invisibles de Del revés, pero que aquí directamente provocan sonrojo. La voz violenta es un matón de discoteca agarrado a su bate de béisbol, la voz del buen rollo es una hippie New Age con aire a Campanilla y la del colega es un pasota que se pasea por la vida del chico enfermo en calzoncillos y bata. La guinda a esta película irrelevante la pone un cura confesor en la despistada piel de Andy García.

PALABRAS EN LAS PAREDES DEL BAÑO

Dirección: Thor Freudenthal.

Intérpretes: Taylor Russell, Charlie Plummer, AnnaSophia Robb, Lobo Sebastian, Walton Goggins, Andy García, Molly Parker.

Plataforma: Amazon Prime Video.

Género: drama. Estados Unidos, 2020.

Duración: 111 minutos.

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