Beethoven lo merece todo
El año que comienza centra en los homenajes al músico por el 250 aniversario de su nacimiento, pero habrá muchas más citas destacadas
Beethoven lo merece todo, pero la celebración del 250º aniversario de su nacimiento no eclipsará otras citas esperadas en la música clásica y la ópera. Los maratones con obra integral se multiplicarán, caso de las nueve sinfonías que John Eliot Gardiner dirigirá en el Palau de la Música catalana entre el 9 y el 14 de febrero. P...
Beethoven lo merece todo, pero la celebración del 250º aniversario de su nacimiento no eclipsará otras citas esperadas en la música clásica y la ópera. Los maratones con obra integral se multiplicarán, caso de las nueve sinfonías que John Eliot Gardiner dirigirá en el Palau de la Música catalana entre el 9 y el 14 de febrero. Pero para machadas, la que tendrá lugar en Ámsterdam con un director español, Gustavo Gimeno y uno de los mayores pianistas vivos: Krystian Zimerman. El 11 de octubre ambos interpretarán con la orquesta Royal Concertgebouw los cinco conciertos para piano en una jornada.
Gimeno comienza el año dirigiendo Aida en el Liceu, a partir del día 13. Pero esta temporada, el teatro de ópera aguarda otra cita esperada: el Lohengrin que montará a partir del 5 de abril como directora de escena Katharina Wagner, bisnieta del compositor y actual responsable del Festival de Bayreuth. Lo dirigirá Josep Pons, que comienza el año con el pianista Javier Perianes en el Capitole de Toulouse con un programa dedicado a Ravel –a quien ambos han consagrado un disco en común– el 10 y el 11 de enero.
En el Teatro Real, el acontecimiento del año llega con el estreno el 17 de marzo de Aquiles en Esciros, una ópera recuperada de Francesco Corselli, no representada en Madrid desde que se estrenara en la capital en 1744, impulsada por el gran Farinelli. La dirigirá Ivor Bolton, que comienza el año también en Madrid al frente de La Flauta Mágica, de Mozart. Wagner también estará presente en el Real desde el 12 de febrero con La valquiria, segunda entrega de El anillo del nibelungo a cargo de Pablo Heras-Casado, que comenzó el ciclo de las cuatro óperas en la temporada pasada.
Javier Camarena cerró un año redondo con su éxito en Madrid. El mexicano triunfó con Il corsario (Bellini), justo después de marcarse un bis en L’Elisir d’Amore, de Donizetti. Camarena comienza el año con Cecilia Bartoli en la ópera de Zúrich con La Cenerentola, de Rossini. Ambos tienen más citas en España: Bartoli en abril, cuando recale en Barcelona, Valencia y Madrid. Camarena, con una amplia gira por España –Barcelona, Oviedo, San Sebastián, Málaga…–, que tiene parada en un concierto extraordinario de la Fundación Scherzo el 7 de febrero en Madrid. Esta organización comienza su ciclo de piano en 2020 con las atracciones de Sokolov (24 de febrero), Volodos (28 de abril), Pogolerich (2 de junio), Andras Schiff (16 de junio) y Pier-Laurent Aimard (29 de septiembre), entre otros.
Entre las citas sinfónicas, Ibermúsica prosigue con la celebración del 50º aniversario del ciclo creado por Alfonso Aijón. Entre las atracciones de este año, destacan Evgeny Kissin (10 de febrero), Zubin Mehta junto a la Filarmónica de Viena (27 de abril) y Simon Rattle con la London Symphony, los días 12 y 13 de mayo. Yuri Temirkanov y la Filarmónica de San Petersburgo sustituyen en el programa a la Bayerischer Rundfunk, que iba a recalar en Madrid en dos conciertos previstos para el 21 y 23 de enero junto a Mariss Jansons, fallecido el pasado diciembre.
La Orquesta Nacional de España, por su parte, comenzará a salir más habitualmente de su guarida en el Auditorio Nacional. El 11 de enero se presenta en Santander con su director titular, David Afkham y el pianista Juan Pérez Floristán. El intérprete vuelve al Palacio de Festivales cántabro, el lugar donde en 2015, con 22 años, ganó el concurso Paloma O’Shea.