Nuevas malas tendencias

Los lectores escriben de la prevalencia del triunfo económico individual sobre el igualitario, la ansiedad que producen los móviles, el dolor menstrual y la corrupción en el PP

Varios jóvenes caminan frente a una persona que duerme en la calle en Madrid.Aitor Sol

Las generaciones contemporáneas han interiorizado los valores del triunfo económico individual frente a la ética de los negocios, la responsabilidad social y la convivencia en igualdad. Valores como la redistribución de la riqueza están perdiendo la carrera frente al desarrollo de prácticas económicas liberales. El papel del Estado como eje de la igualdad, equidad y lucha contra la pobreza debe de ser testimonial. No hay mejor política pública, para esos nuevos followers, que dejar al ...

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Las generaciones contemporáneas han interiorizado los valores del triunfo económico individual frente a la ética de los negocios, la responsabilidad social y la convivencia en igualdad. Valores como la redistribución de la riqueza están perdiendo la carrera frente al desarrollo de prácticas económicas liberales. El papel del Estado como eje de la igualdad, equidad y lucha contra la pobreza debe de ser testimonial. No hay mejor política pública, para esos nuevos followers, que dejar al individuo elegir si reparte limosna entre quienes ellos creen que lo merecen y no quienes lo necesitan. Este cambio de tendencia ocurre porque, cada vez más, la ciudadanía en democracia desconfía de una clase política como parte de la solución. La empatía social y la amplia visión de lo público debe ser lo protagonista. Ser cómplice de tu igual, de sus problemas para buscar soluciones eficientes y realistas que marquen la diferencia, para frenar la desesperación del más débil.

David Acosta Arrés. Granada

Móviles y ansiedad

Hace tiempo me di cuenta de que el móvil me estaba generando ansiedad, las notificaciones continuas, ese enganche a estar informados de todo lo que ocurre en cualquier momento. Intenté quitarme las redes sociales, pero creo que ningún joven es consciente de lo que depende nuestra vida social de ellas hasta que te las intentas quitar. Hoy en día no existes si no las tienes. También he intentado salir a la calle sin el móvil para disfrutar de mí o de mis amigos, pero es imposible porque en esos momentos mi cabeza entra en alerta: ¿Y si mi madre me necesita? ¿Y si tengo una urgencia? Las mujeres, además, vivimos con esa angustia.

Lucía Vicente Mohorte. Cuenca

Reglas dolorosas

Estando de acuerdo en que una mujer con regla dolorosa e incapacitante tiene derecho a poder tener una baja si fuera preciso por no mejorar con antiinflamatorios y/o analgésicos, no veo la necesidad de legislar sobre ello. He sido médica de familia y he dado bajas por ese motivo en más de una ocasión sin ninguna dificultad. Hay ya motivos de baja que se ajustan a esa realidad. Ya existe el diagnóstico de dismenorrea (dolor en la menstruación). Me parece que no es necesario toda esta polémica, aunque sí está bien hablar de estas cosas con normalidad, cuando un médico o médica puede perfectamente sin ningún cambio legislativo dar bajas por este motivo.

Itziar Muro Alcorta. Getxo (Bizkaia)

Lo antiguo para el PP

Parece que Feijóo se desentiende de los papeles de Barcenas que ahora EL PAÍS vuelve a narrar. Dice que es algo muy antiguo y que ya no interesa. No se acuerda de que todos los cargos del PP nombran en todo momento a ETA, que también es algo ya antiguo. Parece que para el PP la antigüedad se mira dependiendo de lo que sea y les interese. Las cloacas son suyas y muy suyas. Eso está claro de momento.

César Moya Villasante. Madrid

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