Gálvez y Sheinbaum protagonizan un debate plagado de ataques

Las candidatas punteras de la contienda presidencial, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez, han protagonizado un debate en el que elevaron el tono de las críticas y acusaciones, a pocas semanas de la elección del 2 de junio. Gálvez, candidata del PAN, PRI y PRD, se presentó más desenvuelta que en el anterior encuentro y más confrontativa hacia Sheinbaum, aspirante de Morena, PVEM y PT, puntera en las encuestas, que respondió a los ataques también con duras acusaciones y apoyándose con más consistencia en el legado que deja Andrés Manuel López Obrador. Gálvez llamó a Sheinbaum “la candidata de las mentiras” y “narcocandidata”, en alusión a las acusaciones no probadas de que López Obrador recibió recursos ilícitos para sus campañas electorales. Sheinbaum se ha referido a Gálvez como “la candidata del PRIAN” y “la corrupta”. El tercer contendiente, Jorge Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, se sumó en menor medida a las confrontaciones, pero cuando lanzó dardos puso en el centro a Gálvez por su relación con el PRI y el PAN. Este segundo debate, de dos horas de duración, tuvo un formato más flexible que permitió a los participantes un mayor margen de maniobra para presentar propuestas —sobre cambio climático, desarrollo económico y combate a la pobreza— y responder a las acusaciones.

Gálvez, que tras el debate anterior dijo que haría ajustes a su estrategia para el encuentro de este domingo, usó pronto la artillería. “Morena se ha convertido en un narcopartido”, dijo la candidata opositora al comenzar su participación. Luego recurrió a varios carteles para mostrarlos mientras hablaba Sheinbaum: “Amigo date cuenta. Claudia miente”, “Claudia es mentirosa serial” y “Deja de mentir”. La moderadora, la periodista Adriana Pérez Cañedo, llamó la atención a Gálvez y dijo que los candidatos habían acordado que solo se podría mostrar carteles mientras tenían la palabra, y no mientras otros estaban en su turno. “El único narcogobierno declarado que ha existido es el de Felipe Calderón, del PAN”, replicó Sheinbaum. La candidata morenista ahora fue más explícita en su respaldo a las políticas de López Obrador (en el debate anterior apenas lo mencionó e hizo más hincapié en destacar sus propios logros al frente del Gobierno de Ciudad de México).

La abanderada opositora lanzó la acusación de que una empresa de Sheinbaum recibió financiamiento público durante la pandemia y que también está entre las compañías más contaminantes. La morenista explicó que la compañía en cuestión pertenecía a su padre, no a ella. “La empresa de la que habla la corrupta del PRIAN es una empresa de 30 trabajadores que tenía mi papá y mi papá ya falleció. Aclarado el punto”, sostuvo. Sheinbaum acusó a Gálvez de haber obtenido contratos públicos para sus empresas siendo titular de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, en el sexenio de Vicente Fox (PAN). También la acusó de haber favorecido la construcción irregular de una plaza comercial en la alcaldía Miguel Hidalgo en el periodo en que fue alcaldesa (2015-2018). Gálvez replicó que no es ilegal obtener contratos públicos; Sheinbaum afirmó que la Ley de Responsabilidades lo prohíbe para las personas que están en el gobierno. “Cada vez que es servidora pública, se sirve del poder público”, lanzó la morenista.

Gálvez recordó que el exmarido de Sheinbaum, Carlos Imaz, fue captado en video mientras recibía dinero del empresario Carlos Ahumada, hace dos décadas, en el episodio de los videoescándalos que sacudió al Gobierno de López Obrador en Ciudad de México. “Tener contratos legales no es un delito, ver a tu marido robando dinero sí lo es”, dijo la candidata opositora. “Eso ya se vio muchísimo”, replicó Sheinbaum. Gálvez también exigió a la morenista responder si estaría dispuesta a que se investigue a los hijos del presidente por las acusaciones de tráfico de influencias en investigaciones periodísticas. También le preguntó si ordenaría que se investigue a Rocío Nahle, candidata de Morena al Gobierno de Veracruz, por señalamientos de corrupción. “La única corrupta aquí es la candidata del PRIAN”, dijo Sheinbaum, que también pidió a Gálvez presentar una denuncia ante la Fiscalía para que se indaguen esos casos. “Es que no voy a contestar a las mentiras de la candidata del PRIAN”, insistió.

La aspirante opositora planteó un viraje a la estrategia de seguridad para que los productores de limón dejen de ser extorsionados por los grupos criminales. “No nos vamos a aliar con los delincuentes como el narcopartido de Morena”, señaló. “La única extorsión que conoce la candidata del PRIAN es la de la priandilla inmobiliaria”, dijo Sheinbaum, en referencia al cartel inmobiliario, la trama de corrupción en la que se involucraron políticos del PAN en Ciudad de México y que el Instituto Electoral local ha prohibido utilizar como arma de ataque contra Santiago Taboada, abanderado panista al gobierno capitalino.

Gálvez criticó a Sheinbaum por la contaminación del agua en varias colonias de Ciudad de México. La candidata opositora llevó al plató una botella de agua sucia en la que, dijo, se hallaron residuos tóxicos. “Ojalá te eches un traguito para que sepas lo que se toman los habitantes de la ciudad”, le dijo. Gálvez también recordó el derrumbe del colegio Rébsamen en el sismo de 2017 y la caída de la Línea 12 en 2021. “Señora de las mentiras, se te cayó un colegio porque no aplicaste la protección civil, se te cayó el Metro por falta de mantenimiento. Tú no vas a ser presidenta, se te caería el país”, le dijo. “La Línea 12 ya fue aclarada, el Rébsamen también fue aclarado; lo que es increíble es que hagan lucro político con ambas tragedias”, deploró Sheinbaum.

Máynez también se refirió a Gálvez como “la candidata del PRIAN”. Criticó que, durante el Gobierno de Fox, en el que colaboró Gálvez, hubo una política de vivienda que orilló a los trabajadores a vivir en las periferias. Sheinbaum secundó que, mientras Gálvez era titular del organismo indígena, fue “cómplice” de la represión al pueblo de San Salvador Atenco, sucedida en 2006. “Soy Xóchitl Gálvez, no Fox, Fox está en su rancho, yo me mando sola”, respondió la candidata opositora. Máynez criticó que ni Gálvez ni Sheinbaum han propuesto una reforma fiscal progresiva y señaló la concentración de riqueza en unas cuantas manos. “Las candidatas jamás van a hablar de eso porque son ese tipo de empresas las que pagan sus campañas, su derroche”, sostuvo.

Gálvez criticó la apuesta del Gobierno de López Obrador por la industria petrolera, y le llamó a Sheinbaum “la candidata del combustóleo”, a pesar de que la morenista ha propuesto una transición hacia las energías limpias. “Aquí la única que daña el medio ambiente y que extorsiona es la candidata del PRIAN, la corrupta”, dijo la morenista. Sheinbaum habló de los logros de su administración en el Gobierno de Ciudad de México y se subió a los hombros de López Obrador. Destacó la creación de empleo, el aumento del salario mínimo, el impulso de grandes obras de infraestructura y la reducción de la pobreza. “El modelo del PRIAN fracasó”, dijo la morenista en su mensaje de despedida. Gálvez pidió a los ciudadanos “despertar” y salir a votar en contra del “autoritarismo”.

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