La resurrección del Atlas afronta un último obstáculo llamado León

La última vez que el Atlas fue campeón no existía internet, eran los tiempos del cacicazgo del PRI y The Beatles aún no cambiaban la historia de la música. Era abril de 1951 y el equipo rojinegro conocía por primera vez lo que era ser triunfador del fútbol mexicano. En aquellos tiempos, el formato del torneo era uno largo al estilo de Europa y no existía la liguilla. Celebraron por todo lo alto porque el día que, matemáticamente, ganaron la Liga vencieron a su gran rival, las Chivas de Guadalajara.

Más de 70 años han pasado. Es la peor racha de un equipo sin lograr un campeonato y es que el Atlas es uno de los clubes fundadores de la Primera División mexicana profesional en 1943. Es un club de solera y juega en el estadio Jalisco que vio encumbrarse al Brasil de Pelé en el Mundial de 1970. Sin embargo, desde 1951 el club se apartó de la gloria.

En la temporada 1965-66, el Atlas quedó segundo detrás del América. En 1999 el Atlas, antes del fin del siglo XX, volvió a una final. En ese torneo ya se disputaba la fase de la liguilla, los mejores ocho de la tabla se enfrentaban entre sí. Para llegar al último partido, los rojinegros vencieron a Monarcas Morelia y al Cruz Azul, equipo que enterró este mayo su maldición de 23 años sin ganar la Liga. Al final se toparon con el Toluca y el marcador terminó como en los partidos de barrio: 5-5 en el global. La melancolía se quedó para Atlas al perder 5-4 en esos tiros decisivos.

Las décadas sin triunfos mayores para Atlas han encontrado pequeñas alegrías. En la década de los 90, un metódico argentino se hizo cargo de trabajar con los jóvenes. Marcelo Bielsa cambió la historia del club al registrar los juegos de los juveniles en VHS y en pregonar la táctica. De ahí emergieron grandes futbolistas mexicanos como Rafael Márquez, Jared Borgetti, Pável Pardo, Oswaldo Sánchez y Andrés Guardado.

Los 123 socios del Atlas vendieron el club a la poderosa cadena TV Azteca en 2013 por unos 38,3 millones de dólares. Los nuevos dueños terminaron vendiendo al club ante la falta de resultados seis años más tarde. El Grupo Orlegi, que ya tenía en su poder a Santos Laguna, apostó por los rojinegros. El grupo empresarial ha invertido en la producción de chile, en una inmobiliaria y en seguros. En el fútbol han empezado a tener éxito.

Los nuevos patrones destinaron a sus mejores futbolistas al Atlas. Hasta la segunda parte del 2021, la fórmula ha dado resultado. Julio Furch, el delantero que ha puesto al club en lo alto con sus goles, ha sido decisivo. La zaga de defensores Diego Armando Barbosa, Anderson Santamaría, Hugo Nervo, Jesús Angulo y Luis Reyes fue la menos burlada del campeonato con solo 10 goles encajados en 17 fechas.

La última barrera del Atlas es el León, quien le ganó la carrera por el título en la temporada 1948-49 por diferencia de solo un punto. En 2021, el conjunto esmeralda ha sacado brillo a sus futbolistas bien dirigidos por Ariel Holan, un antiguo entrenador de hockey que irrumpió en el fútbol a los 43 años. El equipo felino aspira a ganar su novena Liga en una final inédita en México. En la década de 2010 el León emergió del descenso para conquistar tres Ligas, dos de ellas ganadas con el hijo pródigo del Atlas, Rafa Márquez. Eso, en el orgullo dolido del Atlas, aún cala.

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