La autoridad electoral ratifica la victoria del PAN en Puebla tras las denuncias de fraude de Morena

La batalla por las elecciones a gobernador en Puebla podría tener este domingo uno de sus últimos episodios. Tras una semana en la que ha habido robos en sedes electorales, quema de urnas, balaceras y linchamientos, el Instituto Electoral del Estado (IEE) ha concedido esta tarde la constancia de mayoría —el certificado que hace oficial el ganador— a Martha Erika Alonso de la coalición Por Puebla al Frente sobre el candidato de Morena, Miguel Barbosa. Con una diferencia de menos de cuatro puntos frente a su rival, la aspirante de PAN, PRD y Movimiento Ciudadano y esposa del anterior gobernador, Rafael Moreno Valle, será, por tanto, la persona que decida los designios de este Estado del centro de México. 

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Sin embargo, la batalla continuará ante la autoridad electoral. Ambos candidatos se consideran ganadores y el representante de Morena ante el INE, Horacio Duarte, ya adelantó este domingo, antes de emitirse la constancia, que su formación no aceptará el resultado e impugnará la elección; defiende que hay evidencias de que el Gobierno del Estado intervino de manera ilegal en los comicios del 1 de julio. El propio Barbosa también ha asegurado que recurrirá a los tribunales para que se haga justicia ya que sostiene que su candidatura ganó por "más de 10 puntos".

"Los órganos del Estado poblano pretenden arrebatarnos nuestro triunfo. No nos vamos a dejar, ni voy a negociar con Rafael Moreno Valle. La constancia que se ha entregado es producto de un fraude electoral [...]. Les puedo decir que Martha Erika Alonso no será gobernadora porque la Justicia Electoral Federal se lo va a impedir", ha asegurado Barbosa en un vídeo difundido en redes sociales. Por su parte, Alonso ha pedido a través de Twitter que se respete la voluntad de los ciudadanos y ha hecho un llamamiento a la tolerancia. "Exhorto a otras fuerzas políticas a resolver las diferencias a través de los caminos institucionales".

Con la constancia de mayoría termina una semana plagada de acusaciones, en la que ya durante la jornada electoral hombres armados entraron en colegios para llevarse urnas repletas de votos. También miembros del partido de López Obrador han asegurado estos días haber dado con una oficina llena de actas y sábanas de resultados, según defendía el diputado José Juan Espinosa en una entrevista a EL PAÍS. Sin embargo, la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) comunicó posteriormente que se trata de copias que pueden poseer las formaciones políticas.

Los miembros de Morena no han reconocido los resultados que ha ido ofreciendo la autoridad electoral desde el pasado domingo y que contradicen los sondeos a boca de urna que daban a esta formación la victoria. Durante este tiempo, Barbosa ha repetido que se trata de un "golpe electoral de dimensiones incalculables" y de ser "el mayor fraude de la historia de la entidad". Al menos 62 personas han sido detenidas y posteriormente puestas en libertad por los sucesos ocurridos tras la apertura de los colegios electorales el pasado 1 de julio.

Una semana en la que partidarios de una y otra coalición se han enfrentado a golpes y se han mostrado ensangrentados frente a las cámaras de televisión. Está todavía por verse si la constancia de ganador emitida este domingo termina con la violencia desatada tras las elecciones en este Estado. Por el momento la policía ha preferido rodear la sede del Instituto Electoral del Estado para prevenir posibles altercados.