La opulenta preboda del hijo del hombre más rico de la India: concierto de Rihanna, tres días de fiesta y más de 1.000 invitados
Bill Gates, Mark Zuckerberg o Ivanka Trump han sido algunos de los asistentes a las celebraciones previas al enlace de Anant Ambani y Radhika Merchant, publicitado como “el evento social del año”. Los fastos que han precedido a la ceremonia oficial demuestran que la multimillonaria familia no escatima en gastos
“Estamos encantados de invitarlos a las festividades previas a la boda de Radhika y Anant en Reliance Greens, en Jamnagar, del 1 al 3 de marzo de 2024″, decía la invitación oficial que recibieron y aceptaron algunas de las personas más ricas e influyentes del mundo. Bill Gates, cofundador de Microsoft; ...
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“Estamos encantados de invitarlos a las festividades previas a la boda de Radhika y Anant en Reliance Greens, en Jamnagar, del 1 al 3 de marzo de 2024″, decía la invitación oficial que recibieron y aceptaron algunas de las personas más ricas e influyentes del mundo. Bill Gates, cofundador de Microsoft; Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Meta; Larry Fink, director ejecutivo de BlackRock; Stephen Schwarzman, presidente de Blackstone; Bob Iger, director ejecutivo de Disney, o Ivanka Trump, hija del expresidente estadounidense Donald Trump, son solo algunos de los multimillonarios que asistieron este fin de semana a las celebraciones de la preboda del hijo menor de Mukesh Ambani, dueño del conglomerado indio Reliance y uno de los 10 hombres más ricos del mundo. Anant Ambani, de 28 años, se casará este verano con su prometida desde la infancia Radhika Merchant, de 29, hija del industrial Viren Merchant, rico propietario de un imperio de servicios médicos, y no van a escatimar en gastos para celebrarlo. Algo que ya han demostrado en las celebraciones previas.
Las bodas indias son conocidas por su gran riqueza ceremonial y por su despliegue, ya que suelen durar tres días, pero en el caso de la familia Ambani es eso multiplicado por mil. Lo de este fin de semana fue solo la antesala a la ceremonia oficial, que se prevé que tendrá lugar el próximo 12 de julio y promete ser una de las bodas más grandes que se han visto en el país asiático. Algunos medios locales se refieren ya a ella como “el evento social del año”.
Las expectativas están muy altas y no es para menos, teniendo en cuenta la fastuosidad de lo que ha sido solo la antesala. La fiesta comenzó el pasado viernes 1 de marzo. Los invitados fueron llevados en vuelos privados desde las ciudades de Bombay y Nueva Delhi hasta Jamnagar, en el Estado indio de Gujarat, donde la familia Ambani tiene su propia ciudad: Reliance Greens, un complejo para miles de habitantes, incluyendo a los trabajadores de sus propias empresas, con canchas de críquet, tenis, hospital y su propia reserva de animales salvajes ―entre los que se encuentran felinos de gran tamaño y más de 200 elefantes―.
La guía de las invitaciones indicaba que el tema de la primera noche era “una velada en Everland”, para la que los invitados debían asistir vestidos de “cóctel elegante”. La segunda noche, en cambio, la temática giraba en torno a “un paseo por la naturaleza”, ambientado en medio del centro de rescate de animales propiedad de Ambani, con un atuendo sugerido de “fiebre de la jungla”. El último día estaba reservado para Tusker Trails y Hashtakshar, donde las indicaciones estilísticas para los invitados eran lucir el atuendo tradicional indio. Con tanta fiesta temática, no es de extrañar que los asistentes recibieran un documento de nueve páginas en el que se especificaban las instrucciones a seguir en cuanto a la etiqueta, con explicaciones y fotos de referencia para los atuendos, según revelaron algunos de ellos a The Indian Times.
Uno de los momentos más esperados y exclusivos de la celebración fue el concierto privado de Rihanna. La cantante de Barbados llegó el jueves a la India para asistir al evento y dar el sábado un espectáculo que supuso su primera actuación de larga duración en ocho años ―más allá de los casi 15 minutos que ofreció durante el show de medio tiempo de la Super Bowl el año pasado―. Los Ambani consiguieron, con un suculento cheque de por medio, que diera un concierto de 19 canciones, entre las que se incluyeron Bitch Better Have My Money, Man Down, We Found Love, Work o Diamonds. Las redes sociales se llenaron de extractos de interpretaciones como Wild Thoughts, Birthday Cake o Pour It Up y hasta captaron cómo la artista y también empresaria se bajó del escenario para marcarse unos pasos de baile con las estrellas de Bollywood invitadas, como Janhvi Kapoor. Se estima que por esta actuación la cantante recibió seis millones de dólares (unos 5,5 millones de euros), aunque algunos medios apuntan a un caché más alto, hasta los nueve millones de dólares. Pero no es la primera vez que los Ambani se dejan una alta cantidad de dinero en contratar a grandes estrellas: en 2018, Beyoncé participó en la boda de la hermana mayor de Anant, Isha Ambani, y un año después Coldplay actuó en la de su hermano, Akash Ambani.
La celebración también incluyó un espectáculo de luces en el cielo, para el que se utilizaron cientos de drones para proyectar una colorida imagen que representaba a los novios y varios animales exóticos: dos pájaros, un elefante, un tigre, un león y un pavo real. “Para la boda de mi hijo menor, Anant, con Radhika, yo tenía dos deseos importantes: primero, quería celebrar nuestras raíces. Segundo, quería que la celebración fuera un tributo a nuestras artes y cultura”, aseguró en un vídeo para la prensa la madre del novio, Nita Ambani.
De acuerdo con los medios indios, los Ambani contrataron a 21 chefs para dirigir los diversos menús de los tres días de celebración, en los que se sirvieron un total de 2.500 platos únicos. Solo el menú de desayuno disponía de más de 70 opciones, mientras que el almuerzo y la cena ofrecieron más de 250 opciones, de manera que ningún plato se repitiera entre una noche y la siguiente. En la guía enviada a los invitados también se indicaba que habría disponible un servicio de lavandería, planchado, maquillaje, peinado e incluso personas para ayudar a hacer los pliegues del sari, el tradicional traje indio para mujeres de varios metros de tela que deben ser drapeados en el cuerpo.
De acuerdo con el diario Times of India, también se enviaron invitaciones al primer ministro de Catar, Mohamed bin Abderrahman Al Thani; a la reina de Bután, Jetsun Pema; al director ejecutivo de Adobe, Shantanu Narayen; al presidente del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab; al expresidente de Bolivia, Jorge Quiroga; y al ex primer ministro de Australia, Kevin Rudd. Ha sido una fiesta privada, como lo será la boda, pero un despliegue de esta magnitud es difícil de ocultar. Los medios han podido fotografiar detalles de la fiesta y los propios asistentes han compartido sus imágenes en redes sociales. Y esto era solo la antesala.