Alberto de Mónaco niega, de nuevo, una crisis matrimonial con Charlene
“No entiendo todos estos rumores que me hieren, sobre ella viviendo en otro lugar, en Suiza, con reuniones, con cita para vernos. Falsedades”, afirma el príncipe en una entrevista con el ‘Corriere della Sera’
Las especulaciones de una crisis matrimonial entre Alberto y Charlene de Mónaco existen incluso desde antes de que se convirtieran en marido y mujer, en 2011. Muchas veces han sido alimentadas por las largas ausencias de la exnadadora sudafricana de los actos oficiales, a los que ha acudido solo Alberto de Mónaco en más de una ocasión. Este verano, las noticias ponían el foco en que Charlene ha eliminado su cuenta personal de Instagram —en ...
Las especulaciones de una crisis matrimonial entre Alberto y Charlene de Mónaco existen incluso desde antes de que se convirtieran en marido y mujer, en 2011. Muchas veces han sido alimentadas por las largas ausencias de la exnadadora sudafricana de los actos oficiales, a los que ha acudido solo Alberto de Mónaco en más de una ocasión. Este verano, las noticias ponían el foco en que Charlene ha eliminado su cuenta personal de Instagram —en la que compartía imágenes de momentos íntimos con sus hijos— y muchos medios se han hecho eco de informaciones que apuntaban a que había dejado Mónaco para irse a vivir a Suiza. Ni siquiera unas fotos del matrimonio disfrutando del verano en las playas de Córcega acallaron los rumores sobre esa supuesta crisis matrimonial. Ahora Alberto de Mónaco ha salido al paso de todo eso, como ya había tenido que hacer en el pasado, en una entrevista con el periódico Corriere della Sera: “Charlene está siempre a mi lado”, ha dicho tajante.
“No entiendo todos estos rumores que me hieren, sobre ella viviendo en otro lugar, en Suiza, con reuniones con cita para vernos. Falsedades”, asegura tajante Alberto de Mónaco al medio italiano. “Charlene pasó por dificultades hace ya muchos meses, pero ahora, gracias al cielo, lo ha superado y está siempre a mi lado”. Y añade: “Me apoya en el liderazgo del Principado, pero no estamos las 24 horas del día pegados el uno al otro, también somos una pareja trabajadora y el trabajo a veces nos permite vernos solo al final de un largo día lleno de compromisos”.
La princesa consorte de Mónaco estuvo 16 meses de baja, una larga convalecencia derivada de una infección de oído, nariz y garganta, por lo que tuvo que ser operada hasta en tres ocasiones. A lo que se sumó un “profundo agotamiento, tanto emocional como físico” a finales de 2021. Charlene cayó enferma en mayo de 2021, cuando estaba trabajando en un proyecto de conservación de los rinocerontes en Sudáfrica. La exnadadora decidió entonces seguir con su convalecencia en el país africano. Estuvo allí la mayor parte de 2021, lo que disparó entonces esos rumores de crisis matrimonial que siempre les acompañan. El príncipe de Alberto decidió zanjarlos también con una entrevista, en ese caso con la revista estadounidense People. “¡Charlene no se fue de Mónaco exiliada! No se fue porque estuviera enfadada conmigo o con alguien más. Se fue a Sudáfrica para comprobar el trabajo de su fundación allí y para pasar algo de tiempo con su hermano y sus amigos”, dijo añadiendo que lo que se suponía que iba a ser una estancia de poco más de una semana se había alargado por sus complicaciones médicas. Dos meses después de esa entrevista, en noviembre de 2021 dio otra a Paris Match, en la que volvía a hablar sobre su esposa: “Nuestra relación no está en peligro en absoluto, quiero dejar esto claro”, dijo. Y recalcó que su marcha tenía que ver “únicamente con las consecuencias sufridas a raíz de todas las cirugías que ha enfrentado los últimos meses”.
Ahora ha vuelto a salir al pasado con esta nueva entrevista. A ella se suma que, tras unos meses de verano en los que no han aparecido juntos en ningún acto oficial —no lo hacían desde el Baile de la Cruz roja de finales de julio—, en los primeros días de septiembre ya lo han hecho en dos ocasiones. Hace cinco días Alberto y Charlene acudían al lanzamiento oficial de la primera televisión pública de Mónaco, TVMonaco; hace dos días, recibían en los salones dorados del Palacio del Príncipe al nuevo embajador de Francia en el Principado; y ayer mismo, ambos asistían a la última jornada del torneo de golf Princess of Monaco Cup. De todo ello ha dado buena cuenta el perfil oficial en Instagram del Palacio de Mónaco.
En la entrevista con el Corriere della Sera, que tiene lugar en los jardines del palacio de Le Rocher, en Mónaco, también tiene palabras de recuerdo para su madre, Grace Kelly. “¿Qué le decía su madre?”, le pregunta la periodista. “Escuchar a todos, obtener toda la información necesaria antes de tomar una decisión, pero, al final, confiar siempre del corazón y del instinto, de la primera impresión. Lo que intento hacer es la prueba del tiempo, si miro hacia atrás, la primera impresión casi nunca me ha traicionado”. Sobre sus hijos, los gemelos Jacques y Gabriella, de 8 años —él tiene otros dos—, asegura que aún son pequeños, pero que en un par de años les va a empezar a preparar para sus responsabilidades futuras. “Preparar a Jacques y a Gabriella, no se puede separar a dos gemelos, hacer diferencias”, asegura. Sus planes para su hija, cuenta, son los mismos que para su hijo: “La misma atención y la misma formación”. “También hay un papel para ella en el Mónaco del mañana, su hermano Jacques la necesitará, ella también asumirá la responsabilidad. Como yo siempre me he apoyado en mis hermanas Carolina y Estefanía. No puedo hacerlo todo, los compromisos en una familia real deben ser compartidos”.
Charlene, a pesar de sus meses de ausencia, tampoco ha sido ajena a los rumores que se han ido publicando sobre sus problemas de pareja desde hace dos años. Y a ellos se refirió en una de sus primeras apariciones tras su baja: “Me parece lamentable que algunos medios de comunicación difundan tales rumores acerca de mi vida o de mi relación”, dijo en mayo de 2022. “Mi salud sigue siendo frágil y no quiero ir demasiado rápido”, contaba la esposa de Alberto de Mónaco sobre un proceso que calificó de “largo, difícil y doloroso”.
Aunque los royals europeos no suelen desmentir informaciones ni mostrar más de la cuenta su vida familiar, Alberto y Charlene de Mónaco no han sido los únicos que han tenido que salir al paso de informaciones en los últimos tiempos. En febrero de 2022 lo hicieron Victoria de Suecia, la heredera al trono, y su esposo Daniel: “Ha llegado a nuestro conocimiento que existe una amplia difusión de rumores negativos acerca de nuestra relación privada”, arrancaban su escrito los príncipes. “Se están difundiendo acusaciones acerca de una traición en nuestra relación y de un divorcio inminente. En casos normales, no realizamos comentarios sobre rumores y especulaciones. Pero para proteger a nuestra familia queremos dejar claro, de una vez por todas, que los rumores son completamente infundados”.