Las recetas italianas de ‘El Padrino’ o de las galletas de chocolate de ‘Love Actually’: cuatro libros para comer de cine

En las estanterías de la librería nos encontramos varios recetarios extraídos (o interpretados) de películas de Disney, de mangas o de series clásicas de televisión

'Pasta e fagioli', receta contenida en 'El Padrino: El libro de cocina de la familia Corleone', de Liliana Battle y Stacey Tyzzer, en una imagen proporcionada por Norma Editorial.

Hay películas que excitan las ganas, de comer, y libros que provocan la curiosidad de ver cine. Hay libros que podríamos denominar de narrativa gastronómica que han servido de inspiración a grandes directores: recordemos Como agua para chocolate, de Laura Esquivel, llevado al cine por Alfonso Arau, o el bellísimo libro de El Festín de Babette, de Isak Dinesen, adaptado al cine por Gabriel Axel. Exiten historias que han nacido en formato guion guiadas por la pasión por la comida, inolvidable la serie Foodie Love, de Isabel Coixet. Otros, utilizan el formato documental para rodar en 35 milímetros grandes verdades de la historia de la gastronomía, no nos podemos perder The mind of a chef, de David Chang.

Los libros son el reflejo de las tendencias del momento. Así que, seguramente, pronto saldrá el de la serie The Bear (aunque no sabemos si habrá alguna receta más que la tortilla francesa). Por ahora, en las estanterías de la librería nos encontramos varios recetarios extraídos (o interpretados) de películas de Disney, de mangas o de series clásicas de televisión. Entre todos ellos, hay cuatro libros que merecen un vistazo, un tiempo en cocina o un disfrute de lectura.

Uno de ellos es El libro de cocina de la Familia Corleone, escrito por Liliana Battle, con fotografías de Stacey Tyzzer y editado en España por Norma Editorial. Sin duda, El Padrino no sería El Padrino si no fuera por sus escenas vinculadas a la gastronomía, frente a un plato de bucatini a la amatriciana, de una botella de vino o de una buena bandeja de peperonata. La comida en la película de Coppola es un elemento fundamental, la mesa es el lugar donde se reúnen las familias, donde se decide la vida y se cocina la muerte. Hay platos que forman parte indisoluble de una trama: como aquella cazuela de salsa para pasta preparada por un alegre sicario, el pastel de cumpleaños que divide un imperio o aquella ternera marsala de primero y de segundo, asesinato... En este libro se parte del análisis de ciertas escenas para trazar un recetario 100% de cocina tradicional italiana que no tiene desperdicio:

“Cuando Vito Corleone vuelve del hospital, la alegría de la familia es inmensa. Allí están todos para recibirlo y la mamma prepara una enorme cazuela de pollo cacciatore” —escribe Battle en el libro—. El plato elegido para esa celebración no es azaroso. “Vito se entera de que quien mató a Sollozzo y a McCluskey fue Michael, y vemos cómo se le rompe el corazón al ver que su hijo, al que nunca quiso ver involucrado en los negocios de la familia, es ahora la presa”.

Portada de 'El Padrino: El libro de cocina de la familia Corleone', de Liliana Battle y Stacey Tyzzer (Norma Editorial).

Recetas de El Padrino encontramos también en ¡Corten! 100 recetas de película, editado por ColandCol y escrito por Iñaki Mayora. Se trata de una selección de películas, muchas de ellas, a priori, nada gastronómicas, pero donde un bocado, un plato o un guiso forman parte indispensable de la trama o del desenlace. El libro está dividido en seis capítulos (de las películas clásicas a las más sabrosas), así encontramos ese croissant de leche que Holly (Audrey Hepburn) desayuna frente a Tiffany’s; ese Manhattan clandestino, servido en bolsa de agua caliente, que disfrutaban los protagonistas de Con Faldas y a la loco, de Billy Wilder o las galletas de chocolate, empalagosas e irresistibles de Love Actually, entre otros.

Shio ramen con caldo chintán, chasu de cerdo y ajitsuke tamago, receta del libro 'La cocina en Ghibli', de Thibaud Villanova. Imagen proporcionada por la editorial Hachette Heroes.Apolline Cartier

Uno de los libros más curiosos e indispensable para quienes se consideran frikis de las películas del Studio Ghibli es La cocina en Ghibli. Las recetas del estudio legendario. Está editado por Hachette Heroes y escrito por Thibaud Villanova, el cocinero más conocido como Gastronogeek y quien ya ha publicado otros libros gastronómicos con esta editorial como Recetas de película, Stars Wars a la carta o Los Banquetes de Astérix. En este caso y tal y como escribe el autor en el prólogo “este libro es el resultado de diez años de trabajo y experimentación (...)”. “Me he inspirado en todos los largometrajes de Studio Ghibli para recrear para vosotros los platos deliciosos que hallaréis en él”, añade. ¿Sabrosos platos? Pues puede ser, pero lo que no cabe duda es que los apasionados de El viaje de Chihiro agradecerán encontrar la receta del banquete maldito; Los que se apasionaron con Mis Vecinos los Yamada sabrán por qué en este libro sale la receta del shabu-shabu de invierno de Matsuko o los que han visto La Colina de las Amapolas querrán reproducir el bento de Umi.

Pastel del escudo de Hogwarts, receta de 'La cocina de Hogwarts', de Joanna Farrow. Foto cedida por la Editorial Salamandra.

Si las películas de los Studio Ghibli pueden arrastrar oleadas de apasionados, no se queda corta la saga de Harry Potter. El libro de recetas oficial de Harry Potter. La cocina de Hogwarts, editado por Salamandra, es un indispensable de gastronomía, cine y literatura para los más pequeños. El libro está preciosamente editado, dividido en recetas saladas y dulces, con indicaciones de dificultad y de señalizaciones para quienes buscan recetas mágicas para vegetarianos, veganos o para quienes siguen una dieta sin gluten. Y es una excelente idea para meter a los mini-chefs en la cocina siempre rodeados por una mágica y buena receta.

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