Un brote de gripe aviar obliga a sacrificar 87.000 pavos y codornices en Arbeca (Lleida)
Es el primer caso de este virus en aves domésticas en Cataluña desde 2017
La detección de un brote de gripe aviar en una granja de Les Garrigues en Arbeca (Lleida) ha obligado a sacrificar los 37.000 pavos que tenía -y de otras dos explotaciones relacionadas epidemiológicamente con ella-, así como 50.000 codornices de una de granja situada a 200 metros. El Laboratorio Nacional de referencia de Veterinaria de Algete, en Madrid, ha confirmado este viernes el foco de gripe aviar, del tipo H5N1, en la granja de origen d...
La detección de un brote de gripe aviar en una granja de Les Garrigues en Arbeca (Lleida) ha obligado a sacrificar los 37.000 pavos que tenía -y de otras dos explotaciones relacionadas epidemiológicamente con ella-, así como 50.000 codornices de una de granja situada a 200 metros. El Laboratorio Nacional de referencia de Veterinaria de Algete, en Madrid, ha confirmado este viernes el foco de gripe aviar, del tipo H5N1, en la granja de origen del brote. En las otras tres se ha actuado de forma preventiva y los resultados han dado negativo. Ante este caso, el primero en aves domésticas en Cataluña desde 2017, la Generalitat ha aplicado las medidas previstas, según Directiva europea, en el Plan de emergencia y han activado todas las medidas de seguridad en la zona de protección en un radio de 3 kilómetros. En este radio, se han inmovilizado las 10 explotaciones de aves de corral existentes y han comenzado las inspecciones veterinarias para saber cuál es su situación sanitaria.
El centro recuerda que este virus “es una enfermedad viral que afecta principalmente a aves salvajes (especialmente las acuáticas) y aves domésticas y este tipo en concreto no es transmisible a los humanos” en todos los casos de granjas afectadas. Como medida preventiva para evitar su propagación, tras sacrificar a los animales, se está realizando la desinfección del lecho, la gallinaza y el pienso de forma segura a fin de inactivar el virus. En el radio de 10 kilómetros en relación a la explotación principal afectada también se establece la zona de vigilancia.
El anuncio de este caso de gripe aviaria ha sido comunicado por el secretario de Alimentación, Carmel Mòdol, en rueda de prensa en Lleida. Por su parte la directora general de Agricultura y Ganadería, Elisenda Guillaumes, ha querido recordar que “se trata de un virus que no afecta a la salud pública, ya que el H5N1 no es transmisible a los humanos, tal y como aseguran diferentes organismos europeos”. Además ha lanzado un mensaje de tranquilidad a la ciudadanía sobre la salud pública: “estamos ante un problema de sanidad animal y se mantienen las máximas garantías de seguridad alimentaria”. Guillaumes también ha asegurado que “los mecanismos existentes en Cataluña de seguridad alimentaria, de la granja a la mesa, son completamente seguros”, y que “hay suficientes filtros a todos los niveles que garantizan que no haya ningún problema a lo largo de la cadena de seguridad alimentaria”. “Los sistemas de control y vigilancia garantizan que ninguna ave infectada o producto derivado llegue a la cadena alimentaria”, asegura.
Paralelamente, se está estudiando la trazabilidad de la explotación afectada, en la que se detectaron 1.200 pavos muertos por el virus, y se están aplicando los máximos controles veterinarios para prevenir y detectar otros posibles focos. Estas restricciones se levantarán cuando hayan pasado 30 días desde la limpieza y desinfección preliminares de la granja positiva, siempre que la evolución sanitaria de la zona no varíe. Por otra parte, se ha establecido la prohibición de cazar aves silvestres en un radio de 10 kilómetros y se mantienen los niveles de vigilancia en aves salvajes mediante el Cuerpo de Agentes Rurales (CAR).
El secretario, que ha subrayado que gracias a la profesionalidad del sector avícola catalán, se ha podido actuar con la máxima celeridad, ha destacado que “es un sector maduro, que está trabajando para cumplir con los estándares más exigentes en materias como la seguridad alimentaria, el bienestar animal y la sanidad animal”. Según él, “estos casos demuestran que el programa de vigilancia funciona y que las empresas están comprometidas plenamente con la calidad y la seguridad de lo que producen”.
En la temporada 2022-2023 y hasta el momento, se han notificado en España 99 casos de aves silvestres, 7 aves domésticas y 2 aves cautivas infectadas por el virus. En Cataluña, el último caso de influenza aviar en aves domésticas se dio en 2017 en una explotación de recría de patos al aire libre del Gironès.
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