Votación récord para las primeras cuentas de la coalición

El apoyo nacionalista ha sido clave en 14 de los 24 Presupuestos de la democracia

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, aplaudida por el presidente, Pedro Sánchez, y tres de los vicepresidentes, en el Congreso.EUROPA PRESS/E. Parra. POOL - Eu (Europa Press)

En el debate y votación de los Presupuestos, estructurado por departamentos y secciones, no hay una votación final global. La referencia del éxito o del fracaso en esa sesión se toma con el resultado en el marcador del dictámen del preámbulo, que es el último que se examina y el que provoca que los principales portavoces salgan a la tribuna para exponer los motivos de su voto. ...

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En el debate y votación de los Presupuestos, estructurado por departamentos y secciones, no hay una votación final global. La referencia del éxito o del fracaso en esa sesión se toma con el resultado en el marcador del dictámen del preámbulo, que es el último que se examina y el que provoca que los principales portavoces salgan a la tribuna para exponer los motivos de su voto. Esa votación, este jueves, reflejó un apoyo récord y muy contundente: 187 votos a favor del proyecto del Gobierno de coalición, con 11 partidos implicados detrás que representan a unos 12 millones de votantes; y 153 escaños en contra, en una amalgama heterogénea a la que se sumaron PP, Vox, la CUP, JuntsxCat y el BNG. En cuanto se empezó a recontar ese desenlace los parlamentarios que apoyan a la coalición se regalaron unos buenos minutos de aplausos. No se recuerda en el Congreso una votación presupuestaria tan amplia, incluso con Ejecutivos monocolor que disfrutaron en su momento de mayorías absolutas.

Pedro Sánchez y Pablo Iglesias tampoco imaginaban que llegarían a este punto hace 11 meses, cuando superaron la investidura por apenas dos votos de margen: 167 a 165.

La presidenta, Meritxell Batet, levantó al final la sesión de este jueves a las 13.45 y los dirigentes de todos los partidos se precipitaron a los pasillos para constatar que la legislatura tiene por delante un largo recorrido.

Esa votación en el pleno del Congreso remarcó la evidencia de que la actual mayoría presupuestaria parte de los 155 escaños del PSOE y Podemos pero se consolida, como ha pasado siempre en los Ejecutivos en minoría, con los apoyos perennes del PNV y ocasionales de nacionalistas catalanes y canarios. En los 27 años y 24 Presupuestos transcurridos desde 1993, 14 fueron impulsados por gabinetes en minoría a cambio de cesiones a partidos nacionalistas.

Los Presupuestos aún vigentes, los aprobados en mayo de 2018, han resultado los más longevos de esta etapa democrática. Los redactó el ministro popular Cristóbal Montoro (como otros 14 que hizo para Ejecutivos del PP) y salieron adelante por la mínima: justo 176 escaños. PNV, Ciudadanos y Coalición Canaria fueron entonces los aliados. Ese escenario se ha repetido muchas veces, casi siempre que PSOE o PP han tenido que gobernar en minoría.

El presidente socialista Felipe González disfrutó de mayorías absolutas desde 1982 a 1993. En la primera logró un hito con 202 escaños pero las enmiendas a la totalidad contra sus primeras cuentas firmadas por Miguel Boyer las salvó con 181 apoyos, porque varios de sus diputados no votaron. A partir de 1994 tuvo que negociar con PNV, CiU y CC. José María Aznar tuvo que transigir con CiU, PNV y CC desde el principio hasta que en el 2000 recabó su mayoría absoluta. Un salvoconducto que nunca tuvo José Luis Rodríguez Zapatero, que fue el que más practicó la “geometría variable” para sus Presupuestos y lo hizo tanto con PNV, CiU y CC como con ERC, IC, el BNG y la Cha, con votaciones que rondaban entre los 177 y los 180 escaños.

Mariano Rajoy superó cinco Presupuestos con mayoría absoluta (183) y los dos últimos, 2017 y 2018, por la mínima (176) con el apoyo de PNV y Cs, entre otros. Sólo una semana después, el PNV se desmarcó y respaldó la moción de censura que llevó a Sánchez a La Moncloa.

El mayor Presupuesto para la peor situación

Casi 100.000 millones de euros más del primer Presupuesto en tres años. España ha funcionado hasta ahora con el Presupuesto de 2018 prorrogado. El gasto previsto para 2021, que incorpora un primer tramo de los fondos de recuperación procedentes de la Unión Europea, se eleva a 383.542 millones de euros, un 33% más que este año

El mayor gasto social de la historia. Las cuentas prevén un gasto social de 239.765 millones, el más elevado de la historia; un 10,3% más que en 2020.

Pensiones: subida del 0,9%. Los casi 10 millones de pensionistas mantendrán el poder adquisitivo en 2021 con una subida prevista en Presupuestos del 0,9% para las contributivas y del 1,8% para las no contributivas. En caso de que el IPC suba por encima de esos porcentajes, se les compensará la diferencia antes del 1 de enero de 2022. El gasto total en pensiones será de 163.000 millones. El salario de los funcionarios también aumentará un 0,9% en 2021.

3.000 millones de euros para el Ingreso Mínimo Vital. Hay 3.016 millones de euros presupuestados para abonar la renta mínima garantizada, aprobada en junio pasado, a 850.000 hogares durante 2021.

39.000 millones en inversiones, el doble que este año. El Gobierno ha duplicado el gasto en inversiones respecto a 2020, hasta rebasar los 39.000 millones.

Subida fiscal para las rentas más altas. Hay prevista una subida de tres puntos del IRPF para las rentas de capital de más de 200.000 euros al año y de dos puntos para las del trabajo superiores a 300.000 euros (el 0,17% de los contribuyentes), y un alza del IVA de las bebidas azucaradas. También se pondrán en marcha las tasas Google y Tobin y dos gravámenes al plástico y a los residuos.

Mantenimiento de la bonificación fiscal al diésel. Las presiones de Ciudadanos y el PNV llevaron al Gobierno a retirar su plan de eliminación de la bonificación fiscal al diésel con la que pretendían recaudar 500 millones en dos años.

1.000 millones para comprar vacunas. La crisis provocada por la pandemia ha obligado a incrementar el gasto sanitario hasta los 7.330 millones. Hay 1.000 millones presupuestados solo para la compra de vacunas.


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