Laporta, Xavi y las palancas: cómo el Barça pasó de la ruina a ser el mayor inversor en fichajes de la Liga

Las cinco claves del fenómeno futbolístico del verano

Laporta y Xavi, el día de la presentación de este como nuevo entrenador, en noviembre de 2021. David Ramos (Getty Images)

En marzo de 2021, la deuda del FC Barcelona estaba cifrada en 1.350 millones de euros y el patrimonio neto era negativo. Pero la nueva cúpula azulgrana, liderada por Joan Laporta, tenía un plan. En declaraciones exclusivas para EL PAÍS, el presidente explica cómo desde la ruina económica el Barça saltó a convertirse en el club de la Liga española que más dinero invirtió en fichajes este verano.

En un club deprimido económica y socialmente, pocos remedios más efectivos que un ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En marzo de 2021, la deuda del FC Barcelona estaba cifrada en 1.350 millones de euros y el patrimonio neto era negativo. Pero la nueva cúpula azulgrana, liderada por Joan Laporta, tenía un plan. En declaraciones exclusivas para EL PAÍS, el presidente explica cómo desde la ruina económica el Barça saltó a convertirse en el club de la Liga española que más dinero invirtió en fichajes este verano.

1. El magnetismo de Laporta

En un club deprimido económica y socialmente, pocos remedios más efectivos que un tipo con la personalidad de Laporta. El presidente se presentó a las elecciones con una desafiante pancarta a metros del Santiago Bernabéu (“Ganas de volver a veros”), la promesa de la renovación de Messi y la sensación de que en el barcelonismo no había más argumentos que los de su habilidad política (cerró in extremis el aval económico que era necesario para oficializar su mandato). “No hay improvisación, hay liderazgo. Y una gran capacidad de trabajo pensando en todo momento en lo que es lo mejor para el club. Los socios no nos escogieron para lamentarnos, sino para buscar soluciones para volver a posicionar al Barça en la primera línea mundial en todos los aspectos”, analiza Laporta. Y la solución que encontró para reformular deportivamente al Barcelona fue monetizar activos del club bajo el eufemismo de palancas, palabra de moda en el verano azulgrana.

2. ¿Qué es una palanca?

“La denominación de ‘palancas económicas’ se utiliza habitualmente en economía. No hemos inventado nada. Creo recordar que utilicé esta expresión en una entrevista que me hicieron en Barça TV a finales del año pasado cuando me preguntaron por la situación económica del club y posibles soluciones. Entonces dije que estábamos trabajando para activar ‘palancas’ que nos ayudarían a tener la estabilidad económica y financiera, para recuperar la normalidad institucional y reforzar el equipo para tener una plantilla competitiva”, cuenta Laporta.

Las palancas, en definitiva, son los activos que el Barça ha vendido con el permiso de la asamblea de socios compromisarios. El 25% de los derechos de televisión por 25 años se traspasó al fondo de inversión Sixth Street —el 10% por 207 millones y el 15% por 320—. Es decir, el club ha dejado de percibir cerca de 1.000 millones en los próximos 25 años por sumar 527 hoy. Además, se vendió el 49% de Barça Studios por unos 200 millones —un 24,5% a Socios.com por 100 millones y el otro 24,5% por 100 millones más a Orpheus Media, empresa administrada por Jaume Roures, socio fundador de Mediapro—. “No puedes vender un patrimonio que no sea atractivo para un inversor. La apuesta del Barcelona es por necesidad y para volver a competir”, explica Marc Ciria, director general de Diagonal Inversiones, especialista en economía del deporte.

3. Sin riesgo, no hay Laporta

“Si no hubiésemos asumido ese riesgo, hoy no tendríamos este equipazo”, sostienen en el área económica del Barcelona. “¿Otro riesgo?”, pregunta Ciria, “en los próximos años se dejará de percibir un porcentaje de los derechos que representan el 7,5% del presupuesto. Habrá que buscar otras fuentes de ingresos en un año en el que no jugarás en el Camp Nou (comenzarán las obras del Espai Barça, la nueva casa azulgrana)”.

“Activar las palancas”, remata Laporta, “no es más que ejercer una gestión profesional valiente y audaz con el fin de optimizar al máximo los recursos del club con el fin de construir presente y futuro para volver a ser competitivos sin renunciar al modelo de propiedad de la institución y a las esencias del més que un club. No había más alternativas para poder actuar ante un patrimonio negativo en situación de fallida contable, con una deuda y compromisos futuros cifrados en 1.350 millones de euros y un flujo de caja operativo nulo”.

4. La cuenta pendiente:la masa salarial

Activadas las palancas, el presupuesto para la temporada es de cerca de 1.300 millones. Los gastos, de 900. “No hay ninguna otra entidad deportiva del mundo que tenga 900 millones de euros de gastos”, cuenta Marc Ciria. El problema para el Barcelona es que el 69% de los gastos se los lleva el primer equipo. La masa salarial, sumada a las amortizaciones, está cifrada en 620 millones. “Los sueldos del primer equipo es una situación que hemos heredado y trabajamos para solucionarla. El problema no era el sueldo de Messi. Él se merecía lo que cobraba. El problema son los otros que no se lo merecían y todavía siguen en el club”, expone unos de los responsables del área deportiva del Barcelona.

“El club volverá a ser deficitario a nivel ordinario el año que viene”, dice Marc Ciria. Desde el área económica del club responden: “La próxima temporada, seguramente, también vamos a tener que activar otra palanca”. La junta ya cuenta con el permiso de los socios compromisarios para vender BLM (empresa de retail del club, que se encarga de gestionar las tiendas físicas, la venta a través de terceros, venta online y productos bajo licencia).

5. La presión de Xavi

El entrenador tenía claro su diagnóstico. “Necesitamos refuerzos. Ahora depende del club”, alertó en mayo. La dirección deportiva fichó a siete jugadores: Lewandowski, Kessié, Christensen, Koundé, Raphinha, Marcos Alonso y Bellerín, y ató a Dembélé. “La presión es para mí, pero el plantillón es para el Barça”, reflexiona Xavi. Y remata Laporta: “No todo depende de Xavi. Depende de todos. Somos una familia. Todos ganamos, todos perdemos. Y lo que queremos es iniciar un ciclo ganador”.

Para seguir a Laporta conviene mirar el balón. En 2003 reinventó el club a partir de la figura de Ronaldinho; ahora lo vuelve a hacer con el polaco Lewandowski. El fútbol se antepone a los despachos. Se trata de un juego. A partir de hora manda la pelota en el Camp Nou.

Sobre la firma

Más información

Archivado En