La Autoridad Fiscal ve “ficticio” el margen del Estado para gastar
El organismo advierte de que se están agotando las posibilidades de reducir el déficit solo con el crecimiento económico y critica la ausencia de un plan fiscal a medio plazo
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha advertido al Gobierno de que el margen que cree tener por el fuerte aumento experimentado en la recaudación es “ficticio”. “Los elevados niveles de deuda pública y déficit dejan a la economía española en una situación muy vulnerable frente a futuros shocks”, recuerda la institución encargada de velar por la salud de las cuentas públicas.
La Autoridad Fiscal ha publicado este jueves su evaluación sobre ...
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) ha advertido al Gobierno de que el margen que cree tener por el fuerte aumento experimentado en la recaudación es “ficticio”. “Los elevados niveles de deuda pública y déficit dejan a la economía española en una situación muy vulnerable frente a futuros shocks”, recuerda la institución encargada de velar por la salud de las cuentas públicas.
La Autoridad Fiscal ha publicado este jueves su evaluación sobre las proyecciones presupuestarias que el Gobierno ha enviado a Bruselas en el llamado Plan de Estabilidad 2022-2025. El organismo sostiene que las previsiones del Ejecutivo son factibles tanto en el plano presupuestario como en el crecimiento. Es más, es posible que el déficit baje incluso un poco más de lo que planea el Gobierno. Sin embargo, la institución que dirige Cristina Herrero lanza una serie de advertencias importantes. La primera es que, aunque realista, el escenario macroeconómico que plantea el Ejecutivo está sujeto a importantes riesgos a corto plazo por la guerra de Ucrania, la crisis energética, los coletazos de la pandemia y las interrupciones de los suministros.
La segunda consiste en que los objetivos fiscales que se ha planteado el Gobierno son poco ambiciosos para reducir el déficit y sanear las cuentas. Simplemente se confía en el crecimiento económico para ir reduciéndolo. Y tercero, la Autoridad Fiscal alerta de que se está agotando el margen para ir mejorando el estado de las cuentas solo con la recuperación de la actividad y la caída de los gastos relacionados con la covid.
El Gobierno se ha aferrado a que la recaudación está creciendo con mucha fuerza y mucho más de lo esperado para afirmar que tiene margen para tomar medidas de gasto y seguir bajando el déficit. Sin embargo, la Autoridad Fiscal considera que tal margen es “ficticio”. Los niveles de deuda y déficit sitúan a la economía española en una posición muy vulnerable. Por más que la inflación aumente los ingresos a corto, el déficit acabará empeorando a medio plazo debido a los mayores intereses y las actualizaciones de pensiones, salarios de funcionarios y contratos. De modo que cualquier aumento de los ingresos por encima de lo previsto debería destinarse a acelerar la reducción del déficit, señala. Y concluye que si no se toman medidas, el déficit se enquistará en torno a un 3% del PIB y la deuda empezará a subir en relación con el tamaño de la economía a partir de 2025. Esta pasaría desde el 108,8% del PIB hasta el 140% en 2040.
El déficit considerado estructural ha subido tras la pandemia en unas 6 décimas hasta el entorno del 4% del PIB. Y el gasto por intereses aumentará en unos 20.000 millones acumulados de aquí a 2025 respecto a lo que se preveía hace solo un año debido al endurecimiento de la política monetaria y una subida de los tipos de interés de la deuda pública que en solo seis meses ya alcanza los 185 puntos básicos en el bono a diez años. Aunque el plan de reformas remitido a la Comisión Europea cita algunas reformas como la fiscal o la de pensiones que deberían corregir el desfase presupuestario, el programa de estabilidad del Ejecutivo no integra estas medidas ni las cuantifica. No hay una estrategia fiscal a medio plazo que dé certidumbre y autodisciplina, denuncia la Autoridad Fiscal. Y esto “resulta especialmente preocupante en el actual escenario macroeconómico con riesgos más elevados de lo habitual”, dice el informe publicado este jueves.
La Autoridad Fiscal apunta que haría falta un ajuste anual del 0,35% del PIB para alcanzar el equilibrio presupuestario en 2035, bajar la deuda al 80% del PIB en 2040 y contener el pago de intereses en el 2,5% del PIB. “Se trata de un esfuerzo que es difícil mantener en el tiempo”, ha subrayado la presidenta de la Airef, Cristina Herrero en la presentación de su informe. Y ha añadido que en pleno debate europeo sobre las reglas fiscales es importante que haya realismo sobre las sendas adoptadas para reconducir las cuentas.
Dicho esto, Herrero ha criticado la falta de ambición del Ejecutivo para corregir los números rojos. “El año pasado se consiguió bajar el déficit más de lo previsto y sin embargo se mantiene igual la senda de reducción para este año”, ha reprochado. El organismo cree que los objetivos presupuestarios que se ha fijado el Gobierno son “poco exigentes”. Además, pide que se evalúen las medidas tomadas para combatir los efectos de la inflación antes de que se decida prorrogarlas.
Respecto a las cuentas de las comunidades autónomas, la Autoridad Fiscal alerta de que estas tendrán un aumento de los ingresos puramente coyuntural por las liquidaciones del sistema de financiación en 2022 y 2023. “Existe el riesgo de que estos recursos temporales también se destinen a financiar incrementos de gasto o reducciones de otros ingresos con carácter estructural”, advierte el documento.
La Airef ha destacado que los fondos europeos van a tener un peso muy importante en el crecimiento de la economía. Por eso, piden que se dé más información, sobre todo en términos de contabilidad nacional para conocer cuánto realmente está llegando a la calle. “El Programa de Estabilidad apenas contiene información sobre el Plan de Recuperación, un elemento central en el escenario de previsión a medio plazo que cobra mayor relevancia, si cabe, en la situación actual”, asegura el informe. Fuentes del organismo explican que en los datos que ha publicado el Gobierno hay una buena parte de transferencias a otras entidades y que, por lo tanto, es difícil conocer cuánto se ha desembolsado. La Autoridad Fiscal ya había revisado a la baja el multiplicador de impacto en la economía, del 1,2 al 0,9. Y ahora afirma que “la experiencia de 2021 hace ser prudentes a la hora de establecer hipótesis sobre el ritmo de ejecución”. La evolución de la economía dependerá en parte de cuánto se consiga ejecutar.