Análisis:EL ACENTO

Venezuela, capital La Habana

Esté donde esté, cualquiera que sea su estado de salud, el presidente venezolano Hugo Chávez nunca deja de gobernar.

El líder bolivariano inició a principios de mes una gira a Brasil y Ecuador, visita que ya había pospuesto por una dolencia en la rodilla, y de allí se trasladó a Cuba, pero no como tantas veces para cumplimentar a otro ilustre doliente, Fidel Castro, sino él mismo como paciente. El pasado día 10 era, así, intervenido en La Habana de un absceso pélvico, pero sin que se sepa más de su estado, ni del mal que sufre.

Chávez había pedido el permiso a la Asamblea ...

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Esté donde esté, cualquiera que sea su estado de salud, el presidente venezolano Hugo Chávez nunca deja de gobernar.

El líder bolivariano inició a principios de mes una gira a Brasil y Ecuador, visita que ya había pospuesto por una dolencia en la rodilla, y de allí se trasladó a Cuba, pero no como tantas veces para cumplimentar a otro ilustre doliente, Fidel Castro, sino él mismo como paciente. El pasado día 10 era, así, intervenido en La Habana de un absceso pélvico, pero sin que se sepa más de su estado, ni del mal que sufre.

Chávez había pedido el permiso a la Asamblea que corresponde a cualquier ausencia del país de más de cinco días, pero como no se sabe cuándo va a volver, voces de la oposición habían pedido que lo reemplazara el vicepresidente Elías Jaua, y la respuesta de este tenía todo el estruendo del culto a la personalidad, que crece sin pudor en Venezuela: "El presidente legítimo, constitucional y legal [tres adjetivos que significan lo mismo] y en pleno ejercicio de sus competencias es Hugo Chávez y punto, no hay discusión".

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Durante la ausencia, cuando altos representantes del Estado comparecen en actos públicos, lo hacen sobre un fondo de fotografía extra large del jefe, como si tenerlo a la vista les tranquilizara en horas de enfermedad y convalecencia.

En los últimos meses Chávez se ha dejado ver en carne mortal mucho menos de lo que en él es habitual, aunque no ha perdonado apariciones ni peroratas en televisión, su auténtica marca de fábrica. El líder de la izquierda bolivariana ha gobernado siempre por la palabra, como si odiara el silencio.

Hugo Chávez, ex teniente coronel -ahora es, como presidente, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas-, con 56 años cumplidos, asume la presidencia del país desde el año 1999, periodo durante el cual ha ganado democráticamente no menos de una docena de comicios y referendos por la pérdida de tan solo una de estas últimas consultas. Y aunque puede, por ley, ser candidato por un número indefinido de periodos, el político ha afirmado que su última candidatura se produciría en 2012, con lo que, si sigue ganando elecciones, se retiraría en 2018.

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