Columna

La zorra y la fe

El otro día estaba viendo dibujos animados con las niñas y me encuentro con una de esas cadenas que se ven realmente mal. Harto de ver cientos de veces a Clifford, el perro rojo gigante, decido detenerme unos segundos a ver qué dan, aunque mis ojos terminen llorando sangre. Little superheroes, se titula el engendro demente.

En los créditos aparecen unos guerreros luchando contra dragones, robots y monstruos. Bien. Lo de siempre. Cuando comienza la historia, descubro que la trama me suena. Un chaval que se pelea con un gigante y le lanza una piedra en el tobillo, y luego le nombra...

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El otro día estaba viendo dibujos animados con las niñas y me encuentro con una de esas cadenas que se ven realmente mal. Harto de ver cientos de veces a Clifford, el perro rojo gigante, decido detenerme unos segundos a ver qué dan, aunque mis ojos terminen llorando sangre. Little superheroes, se titula el engendro demente.

En los créditos aparecen unos guerreros luchando contra dragones, robots y monstruos. Bien. Lo de siempre. Cuando comienza la historia, descubro que la trama me suena. Un chaval que se pelea con un gigante y le lanza una piedra en el tobillo, y luego le nombran Rey de los judíos. Al final aparece Dios, y continuará. ¡La Biblia, camuflada de Little superheroes! Una clara maniobra del complot judeomasónico: colarnos las sagradas escrituras en los dibujos animados, como quien no quiere la cosa. Me recuerda a un libro de la editorial San Pablo: Los amigos de los niños. En la portada, Cantinflas, Fofó, Chanquete y el Papa. Hoy leo que la Fox monta una subdivisión para rodar películas cristianas: Foxfaith. Esto es la hostia, nunca mejor dicho.

Y es normal, porque el bueno de Mel Gibson tuvo un éxito sin precedentes con La pasión de Cristo. Hay que reconocer que era emocionante. Los latigazos con las alambradas de púas de acero que le arrancaban la piel a tiras, los morrazos contra el pavimento de granito, los escupitajos de la plebe eran impagables. Eso sí que es educación. Los niños irán al cielo a manadas. Si le hacen eso a Cristo, que es un buen chaval, ¿qué nos harán a nosotros? El asunto funciona, así que hagámoslo a saco. Rodemos quince películas al año, pensarán los ejecutivos de la Fox. Creo que están preparando El paraíso perdido, de Milton. ¿Quién hará de Satán? ¿Macaulay Culkin?

Me muero de ganas de ver a los pecadores ardiendo, asados con sus propios aceites corporales. Hay que currárselo para que los niños tengan una educación como Dios manda, no va a ser todo ganar dinero... Que conste que lo hacemos por los niños. Ya basta de confundirlos con Teletubbies (uno de ellos es mariquita, porque lleva bolso), y con Batman, que tanto cuero es sospechoso. Ya basta de progres y modernos. Volvamos al origen. La Biblia siempre ha funcionado. ¿Para cuándo una de Sodoma y Gomorra, pero en plan educativo?

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