Un tribunal permite a profesores vascos no saber euskera

La sentencia corrige el decreto de interinos que aprobó en 2004 el Gobierno autónomo

El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha considerado en una reciente sentencia que es ilegal exigir el máximo conocimiento de euskera a los profesores interinos que imparten clase en castellano porque así lo requiere su puesto de trabajo. La sentencia da la razón en parte al recurso presentado por CC OO el año pasado contra un polémico decreto del Gobierno vasco que reclama el conocimiento de euskera en general, desligado de la plaza que va a ocupar el profesor.

Dicho decreto establece que los docentes sin esos conocimientos amplios de euskera no pueden formar parte del cupo d...

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El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ha considerado en una reciente sentencia que es ilegal exigir el máximo conocimiento de euskera a los profesores interinos que imparten clase en castellano porque así lo requiere su puesto de trabajo. La sentencia da la razón en parte al recurso presentado por CC OO el año pasado contra un polémico decreto del Gobierno vasco que reclama el conocimiento de euskera en general, desligado de la plaza que va a ocupar el profesor.

Dicho decreto establece que los docentes sin esos conocimientos amplios de euskera no pueden formar parte del cupo de profesores interinos estables, que actualmente suman 1.500 en el sistema educativo de Euskadi. Ello aboca a los interinos a la lista de sustituciones, pero al no conocer el euskera, sus posibilidades de recolocación bajan. Se trata, en la mayoría de los casos, de docentes con más de 15 años de servicio. La primera consecuencia práctica del decreto ha sido la pérdida de estabilidad de 157 de ellos.

"Mis alumnos tienen que aprender francés y sus dudas se las debo resolver en francés"

El fallo detalla que la imposición de dicho perfil lingüístico supone una "vulneración del principio constitucional de igualdad" en el acceso a la función pública, ya que "resulta cuestionable la exigencia genérica y a priori del segundo perfil, desligada de las plazas que se vayan a ocupar". Según el tribunal, la consejería de Educación no ha acreditado que la exigencia de ese perfil esté "mínimamente justificada" por la realidad de las plazas vacantes que los interinos están llamados a cubrir, en referencia a la situación de muchos profesores afectados por el decreto que dan clases en castellano porque es lo que demanda la realidad de la zona donde se ubica su colegio.

El decreto del Gobierno vasco exige a los interinos acreditar sus conocimientos de euskera en 2007 como condición indispensable para mantener la estabilidad. La consideración de interino estable garantiza a los docentes que no son funcionarios una plaza, año tras año, en el sistema público de enseñanza. En ese decreto, la consejería también estableció como fecha límite el 31 de agosto de 2004 para acreditar otro perfil lingüístico más leve, que supone un conocimiento básico del euskera, pero no faculta para dar clases. En el curso 2005-2006, un total de 157 interinos han perdido la estabilidad al no poder acreditar en su momento ese nivel de idioma.

Todos han pasado a las listas de sustituciones y la mayor parte de ellos ha logrado recolocarse, aunque, en la práctica, el no disponer del nivel de euskera más alto les deja en una situación muy complicada a corto plazo. La paradoja es que las plazas que han perdido y que impartían íntegramente en castellano han sido ocupadas por otros profesores que acreditan amplios conocimientos de euskera, pero que no les será necesario para dar clase, porque también las impartirán exclusivamente en castellano.

Es el caso de Olga Cabezas, de 55 años. Profesora de francés, imparte clases en la Escuela Oficial de Idiomas de Vitoria y lleva 27 años en el sistema educativo. Desde que entró ha disfrutado de estabilidad, hasta la publicación del decreto en 2004. "Para lo que yo imparto, que es francés, no tengo ninguna necesidad de tener esos conocimientos de euskera. Trato con alumnos que necesitan aprender francés y las dudas que me plantean se las debo resolver en francés".

Javier Nogales, responsable de la sección de enseñanza de CC OO de Euskadi, destaca que la sentencia abunda en un argumento reiterado por el sindicato. "A un profesor de un conservatorio que ocupa una vacante para dar clases de fagot en castellano no se le debe pedir que acredite el nivel de euskera, lo mismo que a otro que dé inglés o francés, por ejemplo". El sindicato ha defendido que hay suficientes puestos en castellano para ubicar a esos docentes, en FP, conservatorios, escuelas de idiomas y enseñanza de adultos, entre otros.

El tribunal no devuelve la estabilidad a los profesores, pero apunta la posibilidad de salidas personales. "La garantía de estabilidad podrá hacerse efectiva en el supuesto de que existan plazas vacantes cuyos requisitos de desempeño, incluidos los lingüísticos, cumplan los profesores", dice

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