Dos juzgados abren investigaciones por contaminación a una empresa de Urdaibai

El Gobierno no aprecia tras ocho meses de mediciones una calidad "anómala" del aire

Dos juzgados están investigando desde principios de este año las posibles emisiones contaminantes y el exceso de ruido de la empresa de aglomerados de madera Inama, ubicada en plena reserva de Urdaibai. Las indagaciones, abiertas tras las denuncias de los vecinos, que llevan 13 años quejándose de la actividad de la empresa, ya han llevado a declarar a varios residentes. Otros vecinos comparecerán a lo largo de las próximas semanas en los juzgados de Instrucción 1 y 3 de Gernika.

La empresa, una de las 119 vascas que figura en un registro europeo de factorías potencialmente contaminantes...

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Dos juzgados están investigando desde principios de este año las posibles emisiones contaminantes y el exceso de ruido de la empresa de aglomerados de madera Inama, ubicada en plena reserva de Urdaibai. Las indagaciones, abiertas tras las denuncias de los vecinos, que llevan 13 años quejándose de la actividad de la empresa, ya han llevado a declarar a varios residentes. Otros vecinos comparecerán a lo largo de las próximas semanas en los juzgados de Instrucción 1 y 3 de Gernika.

La empresa, una de las 119 vascas que figura en un registro europeo de factorías potencialmente contaminantes, sufrió hace un año un escape tóxico que causó diversas afecciones respiratorias a varios vecinos. El suceso supuso la apertura de un expediente sancionador por parte del Departamento de Medio Ambiente. Tras las peticiones de los vecinos, la consejería realizó, entre noviembre y julio pasados y en colaboración con la Universidad del País Vasco (UPV), mediciones atmosféricas en tres puntos cercanos a la fábrica que "no han detectado una calidad anómala del aire", señala Medio Ambiente.

La asociación SOS Muxika, municipio en el que se enclava la planta, resalta las "cuestiones poco claras" de los informes y muestra mediciones de ruido realizadas por la Ertzaintza en septiembre, que superan ampliamente los 35 decibelios marcados por la ley durante la noche. "Tenemos que estar encerrados en nuestras casas", afirman. Dos informes de las empresas Labein y ACC, realizados en noviembre de 2003 y enero de 2004, certificaron que la fábrica superaba los límites de ruidos por la noche.

Inama funciona sin licencia de actividad en la mayoría de sus instalaciones desde la década pasada, cuando acometió una gran ampliación de su actividad. Hace un año, el Gobierno le impuso una decena de medidas correctoras sobre la contaminación atmosférica y acústica, que aún no se han completado. El Departamento de Medio Ambiente afirma que sólo resta la instalación de una pantalla acústica, que está en fase de colocación.

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