Yasir Arafat no financió actos terroristas con fondos europeos

La Oficina Antifraude de la Unión Europea (OLAF) ha cerrado dos años de investigaciones sobre una presunta malversación de fondos europeos de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). "Con los datos disponibles, no se han podido hallar elementos de prueba suficientes que permitan concluir que ataques terroristas o actividades ilegales hayan sido financiados con la ayuda" de la Comisión, sostiene la OLAF.

Las investigaciones respondieron a las denuncias del Gobierno israelí y de algunos eurodiputados que acusaron a Yasir Arafat de desviar fondos europeos para financiar actividades terrorist...

La Oficina Antifraude de la Unión Europea (OLAF) ha cerrado dos años de investigaciones sobre una presunta malversación de fondos europeos de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). "Con los datos disponibles, no se han podido hallar elementos de prueba suficientes que permitan concluir que ataques terroristas o actividades ilegales hayan sido financiados con la ayuda" de la Comisión, sostiene la OLAF.

Las investigaciones respondieron a las denuncias del Gobierno israelí y de algunos eurodiputados que acusaron a Yasir Arafat de desviar fondos europeos para financiar actividades terroristas. La exoneración no significa que todas las cuentas de la ANP estén claras. Entre 1997 y principios de 2000, la dirección palestina transfirió 238 millones de dólares (alrededor de 178 millones de euros) a cuentas en Suiza sin informar a los donantes internacionales.

La Comisión comenzó a aportar fondos a la ANP en noviembre de 2002, después de que Israel suspendiera sus contribuciones en represalia por la segunda Intifada. La UE, que financia con 10 millones de euros mensuales a la ANP, entregó 246,3 millones hasta abril de 2003, sin vincularlos a programas concretos, y desde entonces hasta febrero de 2005, otros 145 millones condicionados.

La OLAF reconoce cambios en la actitud de la ANP, pero también subraya que los pagos de salarios a personas condenadas, la ayuda proporcionada a familias de mártires y las contribuciones a Al Fatah, el mayor partido palestino, "suscitan malos entendidos".