Prohibido investigar

Un decreto impide trabajar con un virus peligroso en el centro de referencia

Un real decreto publicado el pasado 17 de noviembre prohíbe taxativamente la investigación sobre fiebre aftosa en el centro de referencia de esta enfermedad, número uno en la lista de enfermedades ganaderas de gran impacto socioeconómico. Se trata del

Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA), situado en Valdeolmos, Madrid, que es el principal laboratorio español de alta seguridad biológica para investigar patógenos peligrosos y que desde su creación en 1993 ha sido el centro de referencia oficial para este peligroso virus. Los científicos que investigan la fiebre aftosa denuncia...

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Un real decreto publicado el pasado 17 de noviembre prohíbe taxativamente la investigación sobre fiebre aftosa en el centro de referencia de esta enfermedad, número uno en la lista de enfermedades ganaderas de gran impacto socioeconómico. Se trata del

Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA), situado en Valdeolmos, Madrid, que es el principal laboratorio español de alta seguridad biológica para investigar patógenos peligrosos y que desde su creación en 1993 ha sido el centro de referencia oficial para este peligroso virus. Los científicos que investigan la fiebre aftosa denuncian lo que consideran escandalosa descoordinación ministerial y temen ver interrumpido su trabajo.

El decreto autoriza exclusivamente la investigación en fiebre aftosa en el Laboratorio Central Veterinario de Algete (Madrid), un centro puramente de diagnóstico del Ministerio de Agricultura. "No somos un centro de investigación, no es nuestra labor", explica su directora. Por el contrario, en el CISA que es una de las 19 grandes instalaciones científicas españolas y desde hace dos años está declarado instalación científica europea, se desarrolla gran parte de la investigación científica sobre este virus en colaboración con grupos de otros centros nacionales e internacionales. El real decreto sobre medidas de lucha contra la fiebre aftosa, propuesta del Ministerio de Agricultura Pesca y Alimentación y del de Sanidad y Consumo, ha caído como un bombazo entre los investigadores del CISA (dependiente del Ministerio de Educación y Ciencia) que no habían sido informados acerca de su gestación, explican el director Esteban Domingo y la directora técnica de investigación Ana Canals.

Sin explicación ministerial

Salvador Ordóñez, secretario de Estado de Universidades e Investigación Científica (Educación y Ciencia) comentó a este periódico que el tema "es delicado y complejo" y que se está buscando una salida con la ayuda de expertos. Según Ordóñez, él manifestó reservas antes de su aprobación pero Agricultura argumentó que era la transposición de la directiva europea de septiembre de 2003.

"Es alarmante la descoordinación entre ministerios en asuntos que pueden afectar tan negativamente a la investigación en España", afirma Domingo, cuyo anunciado cese al frente del CISA ha provocado una reacción científica de ámbito internacional. "Es increíble que con las dificultades que hay aquí para desarrollar la actividad científica puedan aparecer decretos de este tipo", destaca este científico que recientemente ha sido investido por ello doctor honoris causa por la Universidad de Berna por su investigación en fiebre aftosa.

La directiva europea entre otros muchos aspectos relacionados con la prevención de la fiebre aftosa, especifica que "la manipulación de virus vivos de la fiebre aftosa con fines de investigación y diagnostico se realice exclusivamente en los laboratorios autorizados que figuran en la parte A del anexo XI", y ahí es donde sólo aparece el centro de Algete en España. Estos centros fueron inscritos por cada país, y para algunos de ellos se recogen más de un centro. Sin embargo, en el caso de España, se excluyó el CISA, pese a ser el centro nacional de referencia

El Ministerio de Agricultura, que gestionó por parte de España esa directiva, no encuentra ahora explicación para dicha omisión. María Echevarría, directora general de Ganadería, señala que la elaboración de la directiva europea de hace un año corrió a cargo, por parte española, de su ministerio y que el objetivo es "centralizar el riesgo potencial de este patógeno en un laboratorio". Los investigadores no entienden quién ha podido considerar que la forma de prevenir esta devastadora enfermedad ganadera sea dejar de investigar en su diagnóstico, su tratamiento y las distintas estrategias de vacunación, o su epidemiología.

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