El desarrollo limpio y los fondos de carbono

Para cumplir más fácilmente con el Protocolo de Kioto, las empresas -y los estados- podrán acogerse a fórmulas como los Mecanismos de Desarrollo Limpio y los Fondos de Carbono. Los primeros consisten en desarrollar proyectos limpios en países en vías de desarrollo, no obligados por Kioto, de forma que las toneladas de contaminación ahorradas por las empresas en esos países puedan restarse en el país o la zona económica de origen para el cómputo global de derechos.

Esos mismos proyectos se pueden realizar entre empresas de países firmantes de Kioto y, en ese caso, las empresas de ...

Para cumplir más fácilmente con el Protocolo de Kioto, las empresas -y los estados- podrán acogerse a fórmulas como los Mecanismos de Desarrollo Limpio y los Fondos de Carbono. Los primeros consisten en desarrollar proyectos limpios en países en vías de desarrollo, no obligados por Kioto, de forma que las toneladas de contaminación ahorradas por las empresas en esos países puedan restarse en el país o la zona económica de origen para el cómputo global de derechos.

Esos mismos proyectos se pueden realizar entre empresas de países firmantes de Kioto y, en ese caso, las empresas de ambos se reparten los ahorros logrados en las emisiones.

Países como Holanda ya ha emprendido este camino y desarrolla proyectos en lugares como Costa Rica con éxito. En torno a los Mecanismos de Desarrollo Limpio están creciendo iniciativas para identificar proyectos, buscar financiación y ofrecerlos a las empresas. La Fundación Europa América, activa desde 1994, es uno de los organismos que lleva a cabo en España esta tarea.

Otra posibilidad de sumar derechos es la de los Fondos de Carbono, una especie de fondo de inversión, abierto a la iniciativa pública y a la iniciativa privada, para financiar proyectos que generen derechos. El Banco Mundial tiene varios de estos fondos, en alguno de los cuales hay participación española.

En estos momentos, desde las eléctricas se ha planteado al Gobierno la necesidad de invertir en este tipo de fondos para lograr derechos de emisión de hasta 34 millones de toneladas y aliviar así a los sectores económicos más necesitados.