Francia informó a Brasil del intento de rescate de Betancourt

La hermana de la secuestrada reconoce que París ocultó la operación a Colombia

Las autoridades brasileñas fueron advertidas por París del intento de rescatar a la política colombiana Ingrid Betancourt, según unas declaraciones realizadas por su hermana Astrid, que mantuvo contactos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y esperó en vano en la selva amazónica, durante nueve días, la posible liberación de su hermana.

El diario Le Figaro publicará hoy esas declaraciones, que se contraponen a la sorpresa manifestada por la policía federal brasileña al descubrir en Manaos a un grupo de militares franceses en el que figuraban a...

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Las autoridades brasileñas fueron advertidas por París del intento de rescatar a la política colombiana Ingrid Betancourt, según unas declaraciones realizadas por su hermana Astrid, que mantuvo contactos con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y esperó en vano en la selva amazónica, durante nueve días, la posible liberación de su hermana.

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El diario Le Figaro publicará hoy esas declaraciones, que se contraponen a la sorpresa manifestada por la policía federal brasileña al descubrir en Manaos a un grupo de militares franceses en el que figuraban algunos miembros del Servicio Secreto y un alto cargo diplomático, entre el 9 y el 13 de julio.

Astrid Betancourt reconoce que las autoridades colombianas no fueron avisadas "porque esto podría haber supuesto una traba para la liberación de mi hermana". A su vez rechaza la tesis de un rescate intentado con medios militares: "Pretender que el ministro francés de Exteriores [Dominique de Villepin] haya podido organizar una operación militar para salvar a Ingrid es absurdo". La familia Betancourt ha protestado en el pasado contra el Gobierno del presidente colombiano Álvaro Uribe, argumentando que sus operaciones militares frente a la guerrilla ponen en peligro la vida de los 3.000 secuestrados por las FARC, entre ellos la de Ingrid Betancourt.

La versión de Astrid Betancourt corrobora la del ministro de Asuntos Exteriores francés, Dominique de Villepin, en el sentido de que el envío de un avión fue una medida humanitaria urgente, a la vista de que existían indicios de que la secuestrada -que tiene nacionalidad colombiana y francesa- podía ser liberada y hacía falta un medio para sacarla de la Amazonía y repatriarla. De Villepin niega toda negociación de su país con las FARC.

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