El fuerte temporal impide a la flota vasca salir a la mar para recoger fuel
La flota de vigilancia, rastreo y recogida de fuel de las administraciones vascas permanece amarrado en tierra como consecuencia del temporal que azota la costa vasca, con fuertes vientos y olas de hasta cuatro metros, según fuentes del Gobierno vasco. Las condiciones meteorológicas que se registran en la costa vasca presentan vientos del suroeste, de fuerza 8-10, así como mar de fondo noroeste con olas de cuatro metros.
Las previsiones para mañana apuntan a un cambio de la dirección del viento, rolando a noroeste, lo que podría provocar el acercamiento de la gran mancha de fuel detecta...
La flota de vigilancia, rastreo y recogida de fuel de las administraciones vascas permanece amarrado en tierra como consecuencia del temporal que azota la costa vasca, con fuertes vientos y olas de hasta cuatro metros, según fuentes del Gobierno vasco. Las condiciones meteorológicas que se registran en la costa vasca presentan vientos del suroeste, de fuerza 8-10, así como mar de fondo noroeste con olas de cuatro metros.
Las previsiones para mañana apuntan a un cambio de la dirección del viento, rolando a noroeste, lo que podría provocar el acercamiento de la gran mancha de fuel detectada en Asturias hacia el litoral. La Comisión Interdepartamental mantiene la situación de "máxima alerta". Hasta el momento no se han detectado nuevas manchas de fuel en las cercanías de la costa vasca, ni se han registrado nuevos impactos en las playas. Desde el pasado 13 de enero, en que se registraron afectaciones por fuel en la costa vasca, se han recogido 269.593 kilos de hidrocarburo. De esta cantidad, algo más de 200.000 kilos, por embacarciones en el mar.
La Comisión Interdepartamental para hacer frente al fuel que llegue a la costa vasca insiste en recordar que por el momento no es necesaria la labor de voluntarios y recalca que hasta el momento los dispositivos de limpieza establecidos son suficientes.
Las previsiones meteorológicas para hoy en el País Vasco siguen siendo malas. Los cielos permanecerán cubiertos y hay posibilidad de chubascos débiles y ocasionales, más probables en las primeras horas de la mañana y en zonas del litoral. La cota de nieve se situará entre los 1.000 y 1.200 metros. El viento será de componente Oeste, de fuerte a muy fuerte, y las temperaturas no registrarán cambios significativos.
Los fuertes vientos que dominaron ayer ocasionaron que, hasta las siete de la tarde, seis vuelos con destino a Bilbao tuvieran que ser desviados a Vitoria por motivos de seguridad, según informó el Ministerio de Fomento. El viento en el Cantábrico impidió también la salida de Santiago de Compostela del vuelo que trasladaba al Athletic a Bilbao, que regresó en autobús.
Los incidentes más reseñables tuvieron lugar en la capital bilbaína y sus alrededores. El servicio de Bomberos de Bilbao tuvo que efectuar ayer más de diez salidas, debido a las rachas de fuerte viento, para asegurar cornisas y retirar cascotes, cristales y tejas de vía pública y vehículos, según informó la Policía Municipal.
Parte del tejado del Colegio La Salle de Deusto se desplomó por la fuerza del viento. Debido a los trabajos de retirada de escombros, que se prolongarán al menos hasta el jueves, las clases de Educación infantil y primaria en dicho centro han quedado suspendidas hasta entonces.
El fuerte viento derribó una valla sobre una mujer, de 77 años, que fue trasladada al Hospital de Basurto por lesiones. Hacia las 13.00, la ventisca arrancó de raíz un árbol en la zona peatonal de la Gran Vía de Bilbao, paralizando el tráfico de transporte público hasta que los bomberos lo retiraron. El servicio del tranvía de Bilbao se interrumpió entre las 10.12 y las 11.12 debido a que varios cascotes procedentes de un obra habían caído en la vía.
Además, en Barakaldo, un golpe de viento arrancó el tejado de un bloque de viviendas en la calle de La Inmaculada, en el barrio de Cruces, sin que se produjeran heridos ni daños importantes en las casas. Los vecinos pudieron dormir en ellas anoche ya que se colocaron toldos en los pisos superiores.
En Guipúzcoa, las fuertes rachas de viento provocaron el cierre de un carril de la carretera N-634 en Eibar y el corte del tráfico ferroviario entre Deba y Mendaro debido a la caída de sendos árboles.