La hechicera Molly Moon, nuevo 'best seller' en la estela de Harry Potter
Georgia Byng triunfa con una novela juvenil sobre una niña que tiene poderes hipnóticos
En apenas cuatro meses desde que apareció, en mayo pasado, Molly Moon y el increíble libro del hipnotismo, el libro de Georgia Byng (37 años), ha vendido 55.000 ejemplares en el Reino Unido y va a ser traducido a 25 idiomas. En España, Ediciones SM ha lanzado la edición castellana, y Cruïlla, la versión en catalán. Ambas pertenecen al Grupo Editorial SM, que tiene también los derechos para publicar la obra en gallego y en euskera. Molly Moon, el personaje creado por la escritora británica Georgia Byng, parece la novia perfecta para Harry Potter.
Molly Moon es huérfana, com...
En apenas cuatro meses desde que apareció, en mayo pasado, Molly Moon y el increíble libro del hipnotismo, el libro de Georgia Byng (37 años), ha vendido 55.000 ejemplares en el Reino Unido y va a ser traducido a 25 idiomas. En España, Ediciones SM ha lanzado la edición castellana, y Cruïlla, la versión en catalán. Ambas pertenecen al Grupo Editorial SM, que tiene también los derechos para publicar la obra en gallego y en euskera. Molly Moon, el personaje creado por la escritora británica Georgia Byng, parece la novia perfecta para Harry Potter.
Molly Moon es huérfana, como Harry, y vivió también una infancia de soledad y falta de cariño. Como él, ha sido una especie de hechicería, el hipnotismo, lo que le ha permitido abrirse al mundo y conseguir la fama. David Heyman, el hombre que compró los derechos cinematográficos de las novelas de J. K. Rowling, ha firmado ya una opción para llevar al cine Molly Moon y el increíble libro del hipnotismo, un libro infantil recién publicado en España.
Byng parece un poco sorprendida de su propio éxito, tras 12 años escribiendo casi en vano. 'En realidad, mi auténtico objetivo era escribir un libro que fuera publicado', confiesa enseguida. 'Durante un año estuve trabajando en un libro, pero era demasiado serio para niños de ocho a doce años; era sobre el bienestar de los animales. Me gustaba, pero no tenía la sensación de que fuera el libro que me permitiría dar el salto, porque es difícil entrar en un área como el de los libros para niños. Mucha gente cree que puede escribir cuentos para niños, está inundado de libros para ellos, y es muy difícil convencer a una editorial para que publique tu libro y no el de otro'.
El personaje central del libro es Molly Moon, una niña huérfana que descubre que tiene poderes hipnóticos y decide utilizarlos para conseguir lo que no le ha dado la vida: belleza, dinero, éxito, viajes... Se va a Nueva York para conseguir todo eso hipnotizando a la gente, pero acabará volviendo a su remoto pueblecito inglés para dar mejor uso a sus poderes y ayudar a los niños del orfanato.
'El primer objetivo del libro no es hablar del hipnotismo como una herramienta para hipnotizar a la gente, sino que los niños se den cuenta de que el hipnotismo está por todas partes. Advertir a los niños sobre la publicidad y el hecho de que están todo el tiempo hipnotizados por la televisión, por las imágenes de las estrellas pop', explica la autora.
'El personaje del libro es alguien que puede tener todo lo que quiere, que decide hipnotizar a la gente para que la quieran, que se hipnotiza a sí misma para tener éxito, y ella cree que tiene mucho talento cuando en realidad no es así. Lo importante es la amistad de verdad y no la amistad que puedes comprar. El dinero no lo puede comprar todo. Al final, ella es muy rica y muy famosa, pero no tiene amigos y no está realmente satisfecha'.
Da la impresión de que el personaje acaba pareciéndose algo a su autora, una mujer que tiene cierto desprecio por la vida fácil, por los honores que no son fruto del propio esfuerzo. Aunque odia que le den ese tratamiento, Georgia Byng es en realidad lady Georgia, hija del conde Strafford e hijastra de Christopher Bland, ex director de la BBC. 'Bueno, yo no vengo de una familia muy rica', advierte. 'Mi padrastro es bastante rico, pero no suele sostener a sus hijastros. Mi padre no es rico'.
¿Es quizá un libro contra su padrastro...? 'No...', sonríe. 'Él cree que cada uno se ha de despabilar en la vida; no cree en sostener niños', ríe ahora. 'En fin, perdón, ¿cuál era la pregunta?'. La pregunta era si hay algún paralelismo entre el personaje y la autora. 'Sí, supongo que sí', admite al final. 'Creo que cuando estaba escribiendo este libro estaba desesperada porque se me reconociera como escritora. Esa parte de mí, el desespero, es común a Molly, aunque ella está desesperada por otra cosa, por que la gente la vea. Y en mi caso se trata de que la gente me lea. Se da ese paralelismo, supongo. Pero, por otra parte, no se basa en mí excepto en que cuando era niña solía pensar que las grandes ciudades, el brillo de las luces o ir a los musicales era lo más fascinante del mundo. Molly ha vivido mis propias fantasías de estar en ese mundo, de viajar, los hoteles... Pero al final se cruza un villano en la historia... ¡Pero eso es mejor que no lo cuente!'.
El éxito de Molly Moon empezó antes incluso de que se publicara el libro. David Heyman, el productor de las películas de Harry Potter, lo descubrió al leer las galeradas y decidió pujar de inmediato por los derechos. 'Son muy rápidos ahora. Intentan bucear en las editoriales antes que nadie, antes incluso de que el libro se haya acabado de escribir. Es una de las maneras que tienen de conseguir material nuevo', explica Georgia.
La madre de Molly admite que todavía no ha pensado cómo será su personaje en el cine. 'No, es curioso. No lo he pensado. Supongo que es un mecanismo de defensa interior que me dice que no me excite demasiado con ello hasta que no esté segura de que se va a hacer la película. Porque las cosas pueden salir mal. De momento, Lee Hall está escribiendo el guión. Él escribe guiones estupendos. Cuando diga 'ésta va a ser una gran película', entonces significará que se hará la película. Pero si el guión no funciona, si no ven una película en el libro, olvídalo, se ha acabado. Por eso no quiero excitarme, porque eso puede ocurrir'. Y Molly no podrá hipnotizar al productor.
Sólo para niños
Georgia Byng sólo escribe para niños. 'Nunca he escrito para adultos', confiesa. 'Escribir sobre relaciones, el trabajo y esas cosas. Nunca me ha interesado. No sabría qué decir. Yo conozco a los niños. Tengo 37 años y me ha encantado tener hijos'. Tras un corto matrimonio que le dio una hija hace 12 años, ahora vive con el artista Marc Quinn en Belsize Park, un coqueto barrio del noroeste de Londres. Marc saltó a la fama hace unos años al modelar su cabeza con cinco litros de su propia sangre congelada. Cuando hace 16 meses nació el hijo de ambos, Marc decidió modelar la cabeza del bebé con la sangre de la placenta. Ella no cree que sea extravagante o de mal gusto tener esa escultura en casa. 'Bueno, en realidad no está en casa; está en el estudio. Pero es un cabeza muy hermosa. El nacimiento de un niño es algo maravilloso porque cuando lo ves por primera vez lo encuentras tan brillante y tan fresco, con un olor a rosbif, o a jamón; no a rosbif, a jamón, a fresco jamón cocido... Es uno de los momentos más hermosos de la vida de uno. Y cuando veo la escultura que Marc hizo de la cabeza enseguida me trae a la memoria aquel momento'. ¿Ve la cara de sus personajes? ¿Sabe cómo es Molly? 'Ja ja ja... Sí, sí, y me encanta. Conozco a Molly tan bien que es como si viera su vida en un sueño. Es algo muy particular. Al principio de este año empecé el segundo libro, y hay un villano que en enero no sabía cómo iba a ser. Ahora, con el libro prácticamente acabado, después de trabajar y trabajar tanto, el villano es tan grande en mi interior que es como si lo conociera. Al escribir crees que has de recordar los hábitos del personaje, pero en realidad no hace falta porque es como si le conocieras, como si le vieras la cara. Simplemente, les conoces. Es muy interesante'.