Reportaje:

Un gran caño del Besòs al mar

El emisario evacuará las aguas de lluvia y también las excedentes tratadas en la depuradora

Un colosal tubo de 400 metros de largo y 2,40 metros de diámetro evacuará tanto agua de lluvia como el agua tratada, pero no depurada, procedente de la depuradora del Besòs al mar.Las obras para instalar el emisario secundario de la depuradora del Besòs, que comenzaron ayer, supondrán sumergir el tubo a una profundidad de 16 metros bajo las aguas.

Infraestructuras de Levante, la empresa responsable de la reforma del frente litoral del Besòs, ha informado de que el emisor secundario entrará en funcionamiento cuando el principal no tenga capacidad suficiente para evacuar las aguas tratada...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Un colosal tubo de 400 metros de largo y 2,40 metros de diámetro evacuará tanto agua de lluvia como el agua tratada, pero no depurada, procedente de la depuradora del Besòs al mar.Las obras para instalar el emisario secundario de la depuradora del Besòs, que comenzaron ayer, supondrán sumergir el tubo a una profundidad de 16 metros bajo las aguas.

Infraestructuras de Levante, la empresa responsable de la reforma del frente litoral del Besòs, ha informado de que el emisor secundario entrará en funcionamiento cuando el principal no tenga capacidad suficiente para evacuar las aguas tratadas en la depuradora y en caso de lluvias torrenciales.

El nuevo emisario, que estará instalado el próximo sábado y podrá entrar en funcionamiento a principios del próximo noviembre, tendrá capacidad para desaguar 15.000 litros por segundo.

Las obras forman parte del proceso de mejora de la depuradora del Besòs, que, además de ser cubierta, se ampliará con la incorporación de un ciclo secundario biológico, lo cual permitirá duplicar el nivel de limpieza de las aguas tratadas.

El nuevo emisario se ha construido con plancha de acero procedente de Alemania; en una fundición de Bilbao se doblaron las planchas y se unieron en tramos de 12 metros, según explicó el director de obra del Puerto de Barcelona, Ignasi Grau. En total, el coste es de 9,6 millones de euros.

Los tramos del enorme tubo se trasladaron a Zaragoza para ser pintados y tratados y, finalmente, se han soldado en una plataforma de lo que será el futuro puerto de Sant Adrià de Besòs.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La mécanica para su instalación comenzará entre hoy y mañana, cuando los tramos ya estén unidos, y se traslade el emisario al mar con la ayuda de 280 flotadores formados por bidones de hierro. El tubo será hundido a una profundidad de entre 10 y 16 metros bajo el mar.

El nuevo emisario de la depuradora del Besòs que evacuará aguas de lluvia y aguas tratadas.CARLES RIBAS

Archivado En