Tribuna:

Cambios en la encuesta

La Encuesta de Población Activa (EPA) se ha modificado sustancialmente en el primer trimestre de 2002. Se introducen tres cambios que son de carácter metodológico y afectan a las definiciones utilizadas en la encuesta y al proceso de resultados:

1. Se utilizarán nuevas proyecciones de población. Se trata de recoger el impacto de la inmigración real.

2. Reponderación de la estructura por edades de la población. Se pretende evitar la infravaloración que se produce en los grupos de edad entre 25 a 40 años.por el envejecimiento de la muestra, y la falta de respuesta de aquellas perso...

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La Encuesta de Población Activa (EPA) se ha modificado sustancialmente en el primer trimestre de 2002. Se introducen tres cambios que son de carácter metodológico y afectan a las definiciones utilizadas en la encuesta y al proceso de resultados:

1. Se utilizarán nuevas proyecciones de población. Se trata de recoger el impacto de la inmigración real.

2. Reponderación de la estructura por edades de la población. Se pretende evitar la infravaloración que se produce en los grupos de edad entre 25 a 40 años.por el envejecimiento de la muestra, y la falta de respuesta de aquellas personas que están ausentes de sus domicilios en el momento de realizar la entrevista.

3. Nueva definición del paro. La nueva concepción del desempleo, aprobada por un reglamento de la Comisión Europea de 2000, exige para clasificar a una persona como parada, que renueve su demanda de empleo en el Inem en las últimas cuatro semanas, en vez, de cada tres meses como se exige ahora para el conjunto de la población en paro.

El contacto con las oficinas públicas de empleo debe ser para interesarse por las ofertas de empleo existentes con la finalidad de buscar trabajo, y no con objetivos puramente administrativos (como puede ser, por ejemplo, acudir a renovar la demanda para poder seguir cobrando el subsidio de desempleo o recibir información sobre cursos de formación).

Todas estas modificaciones metodológicas afectarán a los indicadores del mercado de trabajo de la Comunidad Valenciana. En la práctica supone una fotografía distinta a la actual. Por ejemplo, si analizamos los resultados suministrados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), pertenecientes al cuarto trimestre de 2001, se aprecian diferencias significativas entre la nueva metodología y la utilizada anteriormente por la EPA.

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Así, la población ocupada crece en 145.000 empleos adicionales ( 9%), mientras el paro disminuye en torno a 12 mil personas (-6,5%), y la tasa de desempleo se recortaría desde el 10,3% vigente oficialmente hasta el 9%, con una reducción de 1,3 puntos porcentuales.

Por su parte, el número de activos (ocupados más parados) aumentaría en 133.000, (7,4%), y la tasa de actividad alcanzaría el 56,1%, es decir 1,6 puntos porcentuales más.

Con la variación conceptual de desempleo de nuevo vuelve a surgir la polémica sobre la veracidad, compatibilidad y congruencia de los datos de empleo.

En este sentido, pretender que los parados intensifiquen sus contactos con el Inem, para encontrar trabajo, dependerá del grado de eficacia de las oficinas públicas de empleo en su gestión de intermediación laboral. Según el Consejo Económico y Social, sólo el 17% del total de colocaciones registradas son gestionadas por el Inem. Ello, puede ocasionar a que muchas personas se desanimen y prescindan de dichos servicios al no ofrecérseles ningún tipo de trabajo, lo que conduce a que no sean clasificadas como paradas. Además, para fomentar los contactos, no se ha previsto adecuar la renovación de la demanda de empleo al nuevo plazo estadístico de cuatro semanas en lugar de tres meses.

Conclusión: Las modificaciones introducidas en la EPA mejoran los resultados, pero el impacto en la caída del desempleo es sólo un espejismo. No es fruto del crecimiento económico. La disminución de los parados, como consecuencia del cambio en la metodología que endurece las condiciones para considerar a un demandante de empleo como parado, dejará de estar presente en las estadísticas, pero no en la sociedad. Desaparecen de los registros no del mercado. Por todo ello, la solución del paro no es sólo modificar la EPA.

Vicente Castelló Roselló es profesor de la Universidad Jaume I.

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