Dos sicarios matan de tres tiros en Madrid a un colombiano
Los asesinos, que no han sido detenidos, esperaron a la víctima en la puerta de su casa
William Fernando Hernández Lizaranzu, colombiano de 38 años, murió ayer tiroteado por dos jóvenes sicarios cuando iba a entrar con su coche en el garaje de su domicilio, en la calle de Valentín Beato, en Madrid. Dos hombres muy jóvenes, según testigos presenciales, esperaron a la víctima en la puerta de su casa y allí le pegaron tres tiros. Hernández no tenía antecedentes policiales ni en España ni en Colombia.
Según varios testigos, los dos jóvenes sicarios llegaron en una moto de pequeña cilindrada a la puerta del domicilio de la víctima sobre las tres de la tarde y allí se quedaron e...
William Fernando Hernández Lizaranzu, colombiano de 38 años, murió ayer tiroteado por dos jóvenes sicarios cuando iba a entrar con su coche en el garaje de su domicilio, en la calle de Valentín Beato, en Madrid. Dos hombres muy jóvenes, según testigos presenciales, esperaron a la víctima en la puerta de su casa y allí le pegaron tres tiros. Hernández no tenía antecedentes policiales ni en España ni en Colombia.
Según varios testigos, los dos jóvenes sicarios llegaron en una moto de pequeña cilindrada a la puerta del domicilio de la víctima sobre las tres de la tarde y allí se quedaron esperándole. Minutos después, llegó Hernández conduciendo su coche, un Citröen Saxo color blanco. Uno de los jóvenes disparó entonces tres tiros, que traspasaron el cristal del coche e hirieron gravemente a la víctima.
Hernández tuvo tiempo de salir del coche, se puso la mano en el pecho, permaneció unos segundos en pie y cayó desplomado con una parada cardiorrespiratoria. Cuando llegaron los efectivos del Samur, intentaron reanimarle, pero Hernández falleció minutos después. Los dos asesinos huyeron en la moto y, de momento, no han sido detenidos. La policía encontró en el lugar cuatro casquillos de bala del calibre 22 milímetros.
La víctima no tenía antecedentes policiales ni en España ni en Colombia, aunque fuentes policiales están investigando si el fallecido tenía otras identidades. Hernández llevaba unos tres meses viviendo en la capital en unos apartamentos turísticos. El alquiler de estas viviendas cuesta al mes, como mínimo, 930 euros (155.000 pesetas).
Hernández es el primer colombiano que muere este año en Madrid de forma violenta. El año pasado fallecieron asesinados siete colombianos en la capital.