La oposición mantendrá vivo el 'caso Gescartera' con más preguntas e interpelaciones al Gobierno

El PP tiene decidido cerrar el jueves la investigación parlamentaria del caso Gescartera con la votación en una sesión plenaria de las conclusiones de la comisión. Pero la oposición está determinada a intentar impedírselo. Tanto el PSOE como IU, PNV y Grupo Mixto se preparan para mantener vivo el asunto con las medidas a su alcance: preguntas orales en pleno, escritas, interpelaciones, comparecencias en comisión. En realidad, la máxima aspiración, que reclamarán el jueves, es la de reabrir la Comisión Gescartera por los nuevos datos conocidos. El PP se niega rotundamente.

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El PP tiene decidido cerrar el jueves la investigación parlamentaria del caso Gescartera con la votación en una sesión plenaria de las conclusiones de la comisión. Pero la oposición está determinada a intentar impedírselo. Tanto el PSOE como IU, PNV y Grupo Mixto se preparan para mantener vivo el asunto con las medidas a su alcance: preguntas orales en pleno, escritas, interpelaciones, comparecencias en comisión. En realidad, la máxima aspiración, que reclamarán el jueves, es la de reabrir la Comisión Gescartera por los nuevos datos conocidos. El PP se niega rotundamente.

'Convertiremos el Parlamento en una macrocomisión', advirtió ayer Gaspar Llamazares, coordinador general de IU. 'Por mucho que se resistan, por mucho que traten de burlarse del Parlamento cerrando en falso la comisión, vamos a mantener abierta la investigación', prometió.

El PSOE también está decidido a mantener viva la presión sobre el Gobierno 'sin perjuicio del resto de la labor de oposición'. Las cuestiones clave que quedan sin investigar son, a su juicio, la negativa del Ejecutivo a asumir su responsabilidad política por los 'nefastos' nombramientos en la Comisión Nacional del Mercado de Valores y en Hacienda; la laxitud del Ejecutivo en la aplicación de la Ley de incompatibilidades de altos cargos, y el 'abandono' de Hacienda en la investigación del dinero negro de Gescartera.

El portavoz del PP, Luis de Grandes, insistió ayer en la tesis de su grupo: 'La comisión ha acabado y no hay ningún motivo para reabrirla'; 'Gescartera ha terminado le guste o no al PSOE, que creía tener un juguete para deteriorar al Gobierno y lo cierto es que les ha deteriorado a ellos'. María Teresa Fernández de la Vega, secretaria general del Grupo Socialista, ironizó sobre ese 'presunto' deterioro: '¡No intentará el PP convencernos de que cierra la investigación parlamentaria para ayudarnos a que no nos sigamos deteriorando'.

Para desarrollar esta estrategia de acoso y derribo con la intención de mantener vivo el escándalo Gescartera en el Congreso, la oposición cuenta con una serie de mecanismos. Son los siguientes:

- Preguntas orales en pleno. Son las que más interesan a la oposición, por la inmediatez con las que se producen -cada semana, en la sesión de control de los miércoles-, y por el impacto que tienen en la opinión pública a través de los medios de comunicación. IU ya ha anunciado que usará la mayor parte de la cuota que le corresponde para 'abrasar' a Aznar y a los ministros económicos con Gescartera. Los socialistas se plantean aprovechar preguntas sobre otros asuntos para incluir apostillas sobre el escándalo.

- Proposiciones no de ley. La oposición puede vincular sin demasiada dificultad estas iniciativas parlamentarias con el escándalo financiero. Por ejemplo, IU defenderá la próxima semana una proposición de ley para que el presidente de la CNMV sea nombrado por el Parlamento. PSOE e IU prevén incorporar propuestas para reforzar la Ley de Incompatibilidades.

- Petición de comparecencias. La oposición no tiene límites para pedir comparecencias de ministros en sus respectivas comisiones. El problema es que el Gobierno puede retrasar todo lo que quiera la comparecencia, de tal manera que cuando se produce el asunto ya ha perdido actualidad. Además, el ministro puede enviar a su secretario de Estado para que responda en su nombre a las cuestiones más polémicas. Los grupos minoritarios, que aquí no sufren el problema de las cuotas, pretenden aprovechar al máximo este mecanismo de control parlamentario.

- Petición de nuevas comisiones. Los socialistas reiteran su amenaza de pedir una nueva comisión para investigar la actuación de la Agencia Tributaria, sobre todo después de conocer el informe secreto enviado a la juez en el que se reconoce que Enrique Giménez-Reyna se interesó por algunos expedientes de clientes de Gescartera. Aunque las posibilidades de éxito son prácticamente nulas, el PP tendría que pagar el coste político de votar en contra. Otra de las ideas que se plantea IU es pedir una comisión exclusiva sobre los negocios del vicepresidente Rato que han salido a la luz por la Comisión Gescartera, aunque no estuvieran directamente vinculados al escándalo.

- Pedir documentación. La oposición utilizará el artículo 7 del Reglamento para reclamar al Gobierno toda la documentación que éste aún no ha remitido a la comisión de investigación.