Periodistas de todo el mundo apoyan a los informadores acosados por ETA

Periodistas y editores de periódicos de todo el mundo reunidos ayer en Bilbao suscribieron un manifiesto de apoyo a sus compañeros que trabajan en los medios de comunicación del País Vasco sometidos a la violencia etarra. Afirman que la lógica del fanatismo de ETA es, en esencia, equiparable a la que han seguido los autores de la reciente masacre americana al tratar de conseguir sus objetivos políticos a través del terror y la muerte. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, clausuró la jornada de la Asociación Mundial de Periódicos (WAN) invitando a la reflexión autocrítica a la pre...

Periodistas y editores de periódicos de todo el mundo reunidos ayer en Bilbao suscribieron un manifiesto de apoyo a sus compañeros que trabajan en los medios de comunicación del País Vasco sometidos a la violencia etarra. Afirman que la lógica del fanatismo de ETA es, en esencia, equiparable a la que han seguido los autores de la reciente masacre americana al tratar de conseguir sus objetivos políticos a través del terror y la muerte. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, clausuró la jornada de la Asociación Mundial de Periódicos (WAN) invitando a la reflexión autocrítica a la prensa vasca.

El manifiesto aprobado por los 260 asistentes a la jornada organizada por la Asociación Mundial de Periódicos (WAN) sobre Terrorismo contra los medios informativos en el corazón del País Vasco condena 'sin reservas' los recientes atentados contra la 'prensa libre' y destaca las dificultades con que tienen que trabajar los periodistas vascos, a la vez que recuerda que unos medios de comunicación 'libres e independientes son condición fundamental de cualquier democracia'. Por ello, el manifiesto anima a los partidos políticos vascos a denunciar 'sin reservas' toda forma de intimidación y les pide que eviten los discursos que 'inciten al odio a los medios de comunicación'.

Uno de los momentos más emotivos de la jornada de ayer fue el largo aplauso que los asistentes tributaron a Mari Paz Artolazábal, viuda del columnista del diario El Mundo José Luis López de Lacalle, y a Amaia Guridi, viuda de Santiago Oleaga, directivo de El Diario Vasco, ambos asesinados por ETA.

Previamente, los periodistas que han sido objeto de atentados de ETA -Aurora Intxausti (EL PAÍS), Juan Palomo (Antena 3), Gorka Landáburu (Cambio 16) y José Javier Uranga (Diario de Navarra)- ofrecieron el testimonio de su dura experiencia y expresaron de nuevo, en intervenciones contenidas por la emoción, su decidido compromiso con la lucha por la ampliación de los espacios de la libertad de expresión, tan limitados en el País Vasco. El director del programa Protagonistas, de Onda Cero, Luis del Olmo, al que ETA ha intentado asesinar en ocho ocasiones, envió unas palabras grabadas que fueron refrendadas con una ovación.

Los directores de los principales periódicos españoles y vascos protagonizaron una mesa redonda en la que reiteraron las dificultades de muchos medios y periodistas vascos que tienen que trabajar sometidos a las presiones de una organización terrorista. El director adjunto de la Redacción Internacional de The Irish Times, Paddy Woodworth, que coordinó esta mesa, definió como 'surrealista' la actual situación, en la que muchos de los periodistas que él conoció en el País Vasco luchando por la libertad de expresión durante el franquismo hoy tienen que ejercer su profesión escoltados, porque están en la diana de ETA, y añadió que es 'peligrosa' la actual situación, en la que ETA atenta contra la vida de las personas con 'una justificación ideológica'. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, clausuró la jornada pidiendo una 'reflexión autocrítica' a la prensa vasca sobre el papel de los medios de comunicación. Ibarretxe recordó que la sociedad vasca es plural, abierta y tolerante, y transmitió a los medios de comunicación la importancia de no confundir la libertad de expresión con el 'ejercicio de un interés particular'.

Entre los asistentes a la jornada estuvieron el editor de La Vanguardia, Javier de Godó, y el presidente y el consejero delegado de PRISA, Jesús de Polanco y Juan Luis Cebrián, respectivamente, entre otros.