'Llegará un día en que Arzalluz y su gente también pasarán miedo'

En un acto de integridad democrática, la alcaldesa de Lasarte, Ana Urchueguía, logró calmar las iras de varios vecinos de este municipio contra los tres concejales de Euskal Herritarrok (EH) en uno de los plenos más encrespados tras un atentado de ETA.

Pregunta. ¿Cómo tuvo el coraje de actuar con tanta sangre fría?

Respuesta. Por sentido de responsabilidad. Porque no puedo hundirme...

P. El Pleno pudo acabar en una batalla campal.

R. Mi responsabilidad exige mantenerme en mi sitio, incluso protegiendo a los ediles de EH.

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En un acto de integridad democrática, la alcaldesa de Lasarte, Ana Urchueguía, logró calmar las iras de varios vecinos de este municipio contra los tres concejales de Euskal Herritarrok (EH) en uno de los plenos más encrespados tras un atentado de ETA.

Pregunta. ¿Cómo tuvo el coraje de actuar con tanta sangre fría?

Respuesta. Por sentido de responsabilidad. Porque no puedo hundirme...

P. El Pleno pudo acabar en una batalla campal.

R. Mi responsabilidad exige mantenerme en mi sitio, incluso protegiendo a los ediles de EH.

P. De no ser alcaldesa, ¿hubiese actuado igual?

R. Sí, sin duda. En los momentos difíciles tengo la capacidad de controlarme. Tiene que haber un sentido de la ética y de la dignidad en todos los comportamientos humanos.

P. ¿Por qué Froilán quería vivir sin escolta?

R. Por un sentido de la libertad. Pero hubiera sido lo mismo, porque hace diez días pedimos escolta para los concejales y aún no la tienen.

P. ¿Tiene tentaciones de abandonar la política?

R. Yo no me puedo plantear ahora mismo la renuncia. Tengo que asumir la cuota de responsabilidad que me corresponde.

P. Su compañero Jesús Eguiguren ha propuesto 'más acción y menos diálogo'.

R. Al ministro Rajoy le he dicho, y se lo repetiré a Ibarretxe, que no podemos recibir más pésames. En un Estado de derecho, la seguridad de todos tiene que estar garantizada. Un cargo público debe vivir tranquilo y seguro.

P. La rabia que se pulsa en la calle contra los violentos puede estallar en cualquier momento.

R. La sociedad está dividida entre nacionalistas y no nacionalistas. El PNV tiene una gran responsabilidad en lo que está pasando, porque tiene la obligación de protegernos, tanto a los concejales como a los ciudadanos. Ésa es una tarea que la ha dejado de lado y no sé por qué. Además, no ha asumido las repercusiones de su apuesta por Lizarra. La muerte de Froilán es la consecuencia de aquello, y el PNV tiene que reconocer que cometió un error.

P. Arzalluz dijo que es mentira que la mitad de los ciudadanos vascos tengan miedo.

R. Arzalluz no pisa la realidad. La mayoría tiene un miedo atroz, lo contrario es una falsedad y demuestra que este señor vive un sueño. Digámoslo claro: esta sociedad está atemorizada, pero llegará un día en que Arzalluz y su gente también pasarán miedo.

P. ¿Ve riesgo de conflicto civil?

R. La gente va a movilizarse, y debe hacerlo de forma pacífica, eso sí. Hay que decir 'hasta aquí hemos llegado'. Los ciudadanos no podemos seguir así. Hay unos delincuentes-terroristas a quienes debemos marginar socialmente. Los políticos no podemos hacer nada sin un apoyo social que no puede reducirse a votar cada cuatro años. Hace falta una actitud militante y activa en defensa de la libertad, como hizo siempre Froilán. Cuando se den cuenta de que no pueden ir tranquilos por la calle habremos dado un gran paso hacia la paz.

P. ¿Qué le diría a quien apretó el gatillo?

R. Lo más doloroso es saber que alguien de mi pueblo ha vigilado a Froilán para que otros le mataran. Probablemente, será alguien a quien conocemos y con quien hablamos a diario. Éste es tan culpable como el que disparó.