La agricultura ha perdido en Cataluña más de 15.000 empleos durante el último año

El empleo agrario en Cataluña está decreciendo a pasos de gigante. La disminución de la población ocupada dedicada a la agricultura ha sido dramática a lo largo del último año: de junio de 1999 a junio del año 2000 se han perdido 15.600 empleos, según los datos del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), basados en la Encuesta de Población Activa (EPA). En junio, los 66.800 empleos del sector marcaron un mínimo histórico.

La curva que ha seguido el empleo agrícola en Cataluña a lo largo de los últimos tres años ha sido irregular, con picos al alza y a la baja (véase gráfico). Pe...

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El empleo agrario en Cataluña está decreciendo a pasos de gigante. La disminución de la población ocupada dedicada a la agricultura ha sido dramática a lo largo del último año: de junio de 1999 a junio del año 2000 se han perdido 15.600 empleos, según los datos del Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat), basados en la Encuesta de Población Activa (EPA). En junio, los 66.800 empleos del sector marcaron un mínimo histórico.

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La curva que ha seguido el empleo agrícola en Cataluña a lo largo de los últimos tres años ha sido irregular, con picos al alza y a la baja (véase gráfico). Pero los datos muestran claramente una caída en picado a partir del mes de septiembre de 1999.En aquel momento, la población ocupada en el sector de la agricultura (incluyendo ganadería y pesca) sumaba un total de 83.600 personas. Sin embargo, los últimos datos disponibles de Idescat -basados en la Encuesta de Población Activa (EPA), y que corresponden al pasado mes de junio- indican que de aquellos empleos únicamente quedan 66.800. De junio a junio, la cifra se ha reducido en 15.600 personas.

El sindicato agrario Unió de Pagesos (UP) toma estos datos con pinzas, dado que del universo recogido por la EPA prescinde del elevado número de agricultores a tiempo parcial en Cataluña o de los 30.000 mayores de 65 años que continúan trabajando. Pero UP admite la encuesta como "termómetro" de lo que está ocurriendo en el campo catalán. "La caída se explica por un factor estructural como el envejecimiento de la población dedicada a la agricultura como mano de obra familiar, junto con otros factores como la caída consecutiva de la renta agraria en los últimos tres años: del 4%, el 16% y el 11%, respectivamente", señalan fuentes del sindicato. El aumento de los costes de producción también están teniendo un impacto, añaden.

El sector agrícola y ganadero representa el 2,7% de la población empleada en Cataluña, que hoy asciende a casi 2,5 millones de personas (37.000 más que hace un año). Se trata del sector que aporta menos empleo. Por el contrario, el que aporta el grueso de población ocupada son los servicios (cerca del 60%), seguidos de la industria (27,2%) y la construcción (9,3%).

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