Un gran despliegue de la Ertzaintza garantizó la tranquilidad en los dos alardes de Irún

Unas 8.000 personas participaron en el desfile masculino, y 1.000 en el mixto

Irún mostró ayer una imagen insólita desde 1995. Los ciudadanos compartieron las primeras horas del Día de San Marcial con un despliegue sin precedentes de la Ertzaintza que custodió que el Alarde oficial y mixto (con un millar de participantes) y el tradicional (8.000 hombres y 20 cantineras) completaran sus recorridos. No se registraron incidentes en una jornada en la que por vez primera se cumplió la sentencia del Tribunal Superior del País Vasco.

El reloj marcaba las ocho de la mañana cuando arrancó el Alarde oficial de la plaza de Urdanibia. Cerca de un millar de hombres y mujeres ...

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Irún mostró ayer una imagen insólita desde 1995. Los ciudadanos compartieron las primeras horas del Día de San Marcial con un despliegue sin precedentes de la Ertzaintza que custodió que el Alarde oficial y mixto (con un millar de participantes) y el tradicional (8.000 hombres y 20 cantineras) completaran sus recorridos. No se registraron incidentes en una jornada en la que por vez primera se cumplió la sentencia del Tribunal Superior del País Vasco.

El reloj marcaba las ocho de la mañana cuando arrancó el Alarde oficial de la plaza de Urdanibia. Cerca de un millar de hombres y mujeres ataviados con uniformes militares comenzaban a marchar al ritmo de pífanos y tambores en 11 compañías. Era la primera vez que se palpaba un ambiente festivo en cinco años, la primera concentración de tropas no desvirtuada por los enfrentamientos en la arrancada.La Ertzaintza,que no especificó la cifra de agentes desplazados (algunos de ellos buzos), veló por que la fiesta transcurriera en paz y se cumpliera una sentencia del Tribunal Superior que avaló en enero de 1998 la reivindicación de las mujeres que exigían participar en el Alarde en igualdad de condiciones que los hombres. Han hecho falta dos años, varios procedimientos judiciales e incluso la llamada de atención del Parlamento vasco para que se invirtiera el orden de prioridades. La Consejería de Interior fue la que resolvió hace una semana que el desfile oficial cobrara el protagonismo horario y se garantizara el normal transcurrir de la fiesta.

Ante el inusual despliegue policial, hubo quien comentó: "En Irún, hoy no hay dos, sino tres alardes: el oficial, el tradicional y el de la Ertzaintza".

Ayer, no faltaron los pitidos y los insultos a los integrantes del Alarde mixto, pero fueron, en cualquier caso, de menor calado que en ocasiones anteriores. En todo caso, los vecinos volvieron a demostrar que quieren mayoritariamente que el acto se celebre "como siempre". Los iruneses abarrotaron las calles para aplaudir los pasos del desfile tradicional, en el que participan 8.000 hombres y sólo una veintena de cantineras, integrados en 21 compañías.

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