Declarado conjunto monumental el casco histórico de Hondarribia
El Gobierno vasco ha declarado la zona arqueológica del casco histórico de Hondarribia como un bien cultural calificado y lo eleva a la categoría de conjunto monumental. La catalogación afecta a los solares que ocupan la muralla de la edad moderna, el castillo-palacio de Carlos V y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano.Esta declaración, la máxima catalogación prevista por la ley de Patrimonio Cultural Vasco, establece unas condiciones especiales para su protección, lo que llevará al Ayuntamiento de esta localidad a adecuar las normativas urbanísticas del área arqueológica s...
El Gobierno vasco ha declarado la zona arqueológica del casco histórico de Hondarribia como un bien cultural calificado y lo eleva a la categoría de conjunto monumental. La catalogación afecta a los solares que ocupan la muralla de la edad moderna, el castillo-palacio de Carlos V y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y del Manzano.Esta declaración, la máxima catalogación prevista por la ley de Patrimonio Cultural Vasco, establece unas condiciones especiales para su protección, lo que llevará al Ayuntamiento de esta localidad a adecuar las normativas urbanísticas del área arqueológica sujeta a este nuevo régimen.
El casco histórico de Hondarribia se encuentra situado sobre una pequeña colina, elevada sobre la bahía de Txingudi, que en otro tiempo estuvo rodeada de agua y actualmente es tierra firme tras un proceso de relleno de la desembocadura de la ría y la zona de marismas.
El aspecto más monumental de este núcleo viene dado por los grandes farallones de arenisca que constituyen las defensas de la ciudad, levantadas en el siglo XVII, y que aún hoy se mantienen. Del espacio intramuros, también destaca la arteria principal (calle Nagusia), que une la Puerta de Santa María con la Harma Plaza, en cuya alineación se encuentran los elementos más emblemáticos de la ciudad: el Ayuntamiento, la iglesia y el castillo de Carlos V.
El resto de las calles, todas adoquinadas, son de características similares, de menos de tres alturas, guardando una gran armonía entre ellas. Las reformas realizadas han respetado el aspecto de los edificios, con lo que el panorama del casco ha mantenido su espíritu original.