Una exposición condicionada por las formas de la arquitectura

Lisa Dennison asegura que la obra de los arquitectos que diseñaron los museos Guggenheim de Nueva York y Bilbao donde Francesco Clemente ha podido reunir su primera gran exposición retrospectiva, Frank Lloyd Wright y Frank O. Gehry, respectivamente, ha intrigado al artista.No se encuentra en la obra de Clemente señales del interés por la creación de Wright, pero la comisaria advierte que hay huellas de Gehry. En la pintura Negro, blanco y rojo, de 1998, aparece un gran manto que, apartado a un lado, deja ver una mesa de cartón, junto con una calavera y una cabeza sobre un plato. La mesa, desc...

Lisa Dennison asegura que la obra de los arquitectos que diseñaron los museos Guggenheim de Nueva York y Bilbao donde Francesco Clemente ha podido reunir su primera gran exposición retrospectiva, Frank Lloyd Wright y Frank O. Gehry, respectivamente, ha intrigado al artista.No se encuentra en la obra de Clemente señales del interés por la creación de Wright, pero la comisaria advierte que hay huellas de Gehry. En la pintura Negro, blanco y rojo, de 1998, aparece un gran manto que, apartado a un lado, deja ver una mesa de cartón, junto con una calavera y una cabeza sobre un plato. La mesa, descubre Dennison, es una de las célebres piezas de mobiliario creadas por Gehry a base de cartón prensado.

La potencia de la arquitectura del Museo Guggenheim Bilbao ha obligado a transformar la exposición. La importancia de la arquitectura radica no en el diseño general sino "en las formas estructurales y en cómo se relacionan con la iconografía de Clemente", según Dennison. "Tanto arquitecto como artista emplean estrategias de fragmentación y, en ocasiones, se inspiran en formas animales, como el pez, para conseguir los espacios únicos y la iconografía presente en sus respectivas obras".